Fran Castaño: "El Real Valladolid tiene un nombre importante en Ghana"
El descubridor de Salisu habla en clave blanquivioleta de lo que supuso el central y presenta a Frimpong, nuevo jugador del Pucela.
Una temporada más, como viene sucediendo desde la 2017-18, el Real Valladolid contará en su cantera con futbolistas de origen ghanés, tras la llegada de Eugene Frimpong, futbolista que comparte origen, Kumasi, con Salisu, el pionero. Fran Castaño, descubridor de los dos, por medio de la African Talent Football Academy que dirige, presenta al recién llegado y habla del impacto que tuvieron el zaguero y la entidad blanquivioleta en el proyecto de sus sueños.
La primera pregunta es obligada. ¿Cómo es Eugene Frimpong?
Nació en Kumasi, misma ciudad que Salisu, en 2003. Lo vimos en el mismo campo que a él por primera vez y enseguida nos llamó la atención y le incorporamos a la academia, cuando tenía 14 años. Según ha ido creciendo y fue a las selecciones sub-17 y sub-20, fue madurando y haciéndose más extrovertido. En el campo es un jugador muy completo, técnicamente muy bueno, con buenos pases, controles, conducciones y tiro. Su posición es la de mediocentro, aunque puede jugar en más posiciones. Físicamente es fuerte y se implica en defensa, porque no entiende el fútbol de otra manera que no sea mediante la intensidad; le gusta mucho ganar.
Pero Valladolid es distinto, ¿cree que se podrá adaptar?
Si se adapta a la vida, al clima y al idioma y tiene las oportunidades que necesita todo joven que viene de una vida tan diferente, creo que nos dará muchas alegrías a todos. Nosotros confiamos mucho en él, porque es el jugador que más rendimiento nos ha dado y uno de los de más carácter y talento. En este tiempo mucha gente ha querido comprar sus derechos, sobre todo, agentes italianos. Las dudas que pueda haber ya las vivió Salisu, aunque ahora no se recuerdan porque salió todo bien. La paciencia y la confianza serán claves.
Hablando de Salisu, ¿qué impacto supuso para la African Football Talent Academy?
Salisu es nosotros, es casi nuestro nombre, y el que nos abrió las puertas, por ser el primero que vino a Valladolid, gracias a que Víctor y Marcos apostaron por nosotros, y porque es con quien fuimos aprendiendo muchas cosas. Llegó sin formación y sin experiencia y se fue enfrentando a un montón de retos. Si miro hacia atrás, me parece increíble que haya ido todo tan rápido, porque el camino fue muy difícil. A veces esa velocidad nos hizo tener que afrontar muchas cosas rápido y de golpe, aunque deportivamente quemó etapas en menos años que muchos jugadores, pero nos dio muchísimo, porque a raíz de su éxito los chicos ven nuestra academia como una opción real para venir a Europa.
Traer jugadores al club de Ronaldo también les habrá ayudado...
El Real Valladolid tiene un nombre importante en Ghana. Nos da valor tener un buen vínculo con ellos y que jugadores nuestros con nivel hayan podido venir aquí. La temporada pasada nos mandaron las equipaciones y eso nos ha dado un caché mayor, porque llevábamos el escudo de un club español, y además, de Ronaldo.
¿En qué estado se encuentra el proyecto de la academia?
Nuestra imagen y nuestros resultados están muy por encima de la inversión y de nuestras instalaciones; con un poquito más, los resultados podrían ser mejores. Queremos dar un pasito más a nivel de infraestructuras e invertir más en la búsqueda de talentos. Queremos ser más grandes, aunque para poder crecer es necesario el dinero. Por ejemplo, el tema del transporte en Ghana es complicado. Pero queremos filtrar mucho más. Nuestra captación hoy en día la dividimos entre jugadores más en desarrollo, técnicamente muy buenos y que han jugado mucho en la calle, pero a los que les falta entender el juego, y otros más hechos, más desarrollados física y técnicamente, con los que el trabajo está más enfocado a lo táctico.
Habrá escuchado mil veces esta pregunta pero, ¿por qué Ghana?
Porque creo que reúne las condiciones que busco en mi vida. Creo que merece la pena apostar por gente que no ha tenido tantas oportunidades y que no lo tiene fácil. Es un país sin muchas instalaciones y sin mucho trabajo profesional, pero con mucho talento. Hay muchísimos jugadores, igual que en países vecinos, y muchísima población joven que casi toda juega al fútbol. El talento que hay es diferente al nuestro; hay jugadores más fuertes, y el fútbol va cada vez más encaminado a lo físico, pero, a la vez, tienen más calle. Creo que hay mucho potencial, y con más trabajo e inversión, pueden salir muchísimos más jugadores de élite, porque, además, es una opción fácil y barata para clubes que no pueden invertir mucho en el mercado latino o por la fuerte competencia que hay en el español. Creo que es el momento de apostar por el fútbol africano.