La paz de Ramos
Florentino no quiso entrar en detalles sobre la marcha del central y le emplazó a un futuro en el que pueda regresar al Real Madrid, en un rol diferente.
Florentino Pérez tomó la palabra por primera vez desde que se consumase la marcha de Sergio Ramos del Real Madrid, 16 temporadas después. El ya excapitán blanco no se fue en silencio, aprovechó su rueda de Prensa para contar su versión de los hechos: el Madrid le ofreció un año más y él quería dos, por lo que rechazó la oferta; cuando quiso aceptarla, ya en junio, el club le comunicó que ya había caducado y que no tenía sitio en el equipo, una fecha de expiración de la oferta que, afirma el sevillano, desconocía.
Florentino por supuesto dio su punto de vista sobre esa cuestión en la entrevista que concedió en 'El Transistor' de Onda Cero el jueves: "Le ofrecimos un contrato, le dijimos que tenía un plazo, y él no lo admitió. Él pensaba otra cosa...". Aunque segundos antes había dicho que no iba a "dar mi versión", Florentino finalmente transmitió la postura del club: la fecha de caducidad siempre existió. Pero fue la única referencia negativa hacia Ramos en una entrevista en la que el presidente blanco se centró en recordar todo lo bueno que le ha unido con el de Camas, incluido un posible futuro de nuevo en el Madrid cuando finalice su carrera.
"Pasé un mal rato, yo a Sergio lo quiero como un hijo, yo le traje en 2005", explicó Florentino sobre el acto de despedida que ejecutaron juntos. "Tengo adoración por Sergio, no quiero hablar de ese tema (sobre la negociación de la renovación). Le irá muy bien seguro y volverá, esta es su casa. Me llevaré una alegría si llega un club y le ofrece lo que nosotros no le hemos podido dar", se expresó el dirigente madridista. Buenas palabras para firmar la paz de Ramos.
De hecho, José Ramón de la Morena consultó a Florentino sobre esa tendencia que tienen los grandes jugadores del Madrid a irse a malas con el club, o en situaciones de tensión. "No es fácil, pero llevo muchos años y creo que las administro bien (esas salidas). Siempre hago todo pensando en el Madrid. Lo dijo Raúl en su rueda de prensa de despedida. ¿La salida de Casillas? El día que él se fue, que no se fue bien, le llamé y le dije que tenía que hacer una despedida con los títulos. Quizás, con los nervios, el día anterior no estuvo muy acertado. Él tenía que despedirse como una leyenda".
Florentino-Ramos, una negociación dura
Con Ramos no se llegó a ese paso en falso, como fue aquella primera despedida de Casillas, y la intención general de Florentino fue la de calmar las aguas con vistas a un futuro en el que pueda regresar al Madrid, como ya hicieron otros que salieron de forma abrupta: Hierro, Raúl, el propio Casillas... Desde hace meses, las negociaciones entre el Madrid y el entorno de Ramos se centraron en el central y el presidente, ante la tensión que se vivía con otros integrantes del proceso, como René Ramos, agente y hermano del capitán, y José Ángel Sánchez, director general del club.
Esas negociaciones cara a cara entre Ramos y Florentino no llegaron a buen término, pero el presidente mostró su empeño en la entrevista en Onda Cero por dejar atrás las rencillas y trasladar que, cuando finalice su carrera profesional como jugador, el sevillano tendrá un hueco en la estructura del club, ya sea entrenando (como ya pasó con Xabi Alonso, Raúl, Guti, Álvaro Benito...) o como representante blanco, al estilo de Casillas o Paco Gento.