Franquesa: “El gol de Bustos era legal, le toca en el hombro"
El carrilero zurdo, autor del 1-1 ante el Rayo, se quejó de la decisión del árbitro y del VAR al anular el tanto del argentino antes del descanso. Sobre la final: “Queda muchísimo”.
Esconder la euforia y el optimismo en Girona parece misión imposible. El triunfo en Vallecas ante el Rayo (1-2) les deja a un solo paso de regresar, dos años después, a Primera División y las sensaciones que desprende el conjunto de Francisco son las que les hacen mantener la confianza. El 1-2 dejó un gran sabor de boca en el vestuario rojiblanco y en su afición, pero es inevitable pensar qué hubiera pasado si el colegiado y el VAR no hubieran anulado el tanto de Nahuel Bustos al borde del descanso. Habría sido el 1-2 y, en el fútbol ficción, el gol de Mamadou Sylla, el 1-3. La renta para afrontar el duelo de vuelta pudo ser más importante.
Lo cierto es que el Girona hace tiempo que busca tener mayor suerte con las decisiones arbitrales y del VAR, pero no acaba de llegar. Vallecas puede ser considerado un escenario de mal recuerdo en este aspecto para los gerundenses porque, tras los dos penaltis no señalados en el duelo de Liga regular, tocó sumar el gol anulado a Bustos. Se consideró que el disparo de Gumbau lo desvió el argentino con la mano en lugar de con el hombro y de ahí que no subiera al marcador. Ello provocó un gran enfado en la expedición gerundense y Franquesa no se escondió: “El gol de Bustos era legal. Le tocó en el hombro, se vio claramente, pero el árbitro decidió que no era gol. No es la primera vez que pasan cosas de estas aquí (por Vallecas). No es fácil porque nos estamos jugando mucho y pueden cambiar el futuro de ambos clubes. No podemos permitir que decisiones así nos perjudiquen”. Eso sí, lo que en esa ocasión les quitó el VAR, al final del duelo se lo devolvió al advertir a Pulido Santana, colegiado principal del duelo, que el tanto de Pozo no podía ser válido por culpa de un fuera de juego previo de Ulloa.
El VAR fue protagonista en Vallecas, pero lo que es inamovible es el 1-2 con el que el Girona afrontará la vuelta el domingo en Montilivi. Franquesa se mostró contento por su gol (el 1-1) y el resultado final, aunque “queda muchísimo. Sabemos que es un gran resultado y estamos contentos, pero no nos podemos relajar”. Y más teniendo en cuenta que el Rayo ya les demostró su potencial. En los primeros 40 minutos de partido, los catalanes no lograron contener a los madrileños y sufrieron: “Nos costó empezar. El Rayo arrancó muy fuerte, presionando arriba y es un gran equipo. Además, en estos campos es difícil empezar. Pero le dimos la vuelta, en la segunda mitad salimos mejor, y estamos felices”. Ahora deberán sentenciar la eliminatoria el domingo en casa.