TENERIFE
Una temporada sin remontadas
El Tenerife fue incapaz de dar vuelta el marcador cada vez que se puso por detrás. Lo máximo que consiguió fueron cinco empates, como en la última jornada ante el Oviedo.
Se terminó la temporada 20/21 y el Tenerife fue incapaz de remontar un partido. Se hizo una costumbre que cada vez que el rival se adelantaba en el marcador (y fueron muchas), daba la sensación de que el conjunto de Ramis no reaccionaría. Y así sucedió. Lo máximo que se rescató fueron cinco empates.
En total, el conjunto blanquiazul empezó perdiendo en 21 partidos, de los cuales en 16 acabó derrotado. Las únicas excepciones fueron contra el Sporting de Gijón (1-1) cuando Zarfino, en el minuto 85, niveló el tanto de Pedro Díaz, o cuando Jorge Padilla rescató a los suyos ante el Fuenlabrada (1-1), o cuando Carlos Pomares, ante el mismo rival, empató el choque en el Heliodoro (1-1).
Falta por reseñar el tanto de Ramón Folch en La Rosaleda que igualaba el choque ante el Málaga en la recta final (1-1) o más recientemente el gol de Suso Santana contra el Oviedo que valía para remontar transitoriamente un encuentro que al final terminaría 2-2. Esta fue la ocasión que más cerca estuvo.
La última vez que los tinerfeños supieron voltear un resultado adverso fue la campaña pasada, cuando el 4 de julio de 2020 los de Rubén Baraja vencieron en el Juegos del Mediterráneo al Almería que se había adelantado gracias al uruguayo Darwin Núñez. Sin embargo, Luis Milla, de penalti y Álex Bermejo en la prolongación, le dieron los tres puntos al Tenerife.
Hubo algunos partidos en los que el Tenerife rozó la épica este curso, pero se quedó a las puertas como el duelo jugado en el Carlos Tartiere donde el Real Oviedo se adelantó 2-0, pero los insulares con uno menos, consiguieron el 2-2. Las fuerzas no le alcanzaron ya que finalmente los asturianos ganaron 4-2.
Bastante lejos quedan esas gloriosas reacciones como la que se produjo contra el Osasuna en marzo de 2019 levantando un 0-2 en contra para terminar venciendo 3-2 o el 1-3 ante el Rayo Majadahonda que significó media permanencia tras empezar perdiendo desde el primer minuto. Menos espectacular, pero muy recordado fue el triunfo en el derbi de mayo de 2019 cuando Carlos Ruiz y José Naranjo hicieron insuficiente el tanto inicial de Cristian Cedrés. Eran otros tiempos, tiempos de remontadas que el Tenerife añora.