El Juvenil A del Barça sobrevive al caos y se proclama campeón
Consiguió vencer a domicilio al Cerdanyola (1-3), pese a contar con 14 bajas, entre jugadores y staff, por dos positivos de covid19 y doce contactos directos.
El Juvenil A del FC Barcelona ha sido capaz de superar todas las adversidades habidas y por haber, y proclamarse campeón de la Liga en la última jornada tras haber estado toda la temporada viviendo a la aspiración del Espanyol. Lo cierto es que las cosas pintaban muy mal para el Juvenil cuando el lunes se confirmaron dos positivos de covid 19 entre los jugadores, iniciando de esta forma el protocolo de seguridad sanitaria, que apartó a las dos personas afectadas así como un total de doce contactos directos.
La situación era tan caótica que el Juvenil A tuvo que recurrir de forma masiva con jugadores del Juvenil B para completar la convocatoria y recuperar a dos jugadores del filial, con ficha de juvenil, Peque y Blade, que habían empezado ya las vacaciones.
Finalmente tanto esfuerzo ha valido la pena. Y es que el Juvenil A no tan sólo logró vencer 1-3 al Cerdanyola de Vallés, sino que además el empate del Espanyol contra el Nástic (1-1) acabó dando la carambola perfecta para que los blaugrana se proclamaran campeones.
Ante la ausencia del técnico del Juvenil A, Sergi Milà, fue el preparador físico el encargado de sentarse en el banquillo, acompañado del fisioterapeuta y del segundo entrenador del Juvenil B. Todos estuvieron muy atentos de siempre tener siete jugadores del Juvenil A en el campo, ya que si lo hubieran incumplido, el partido se hubiera dado por perdido. Un gol de Cerdà, otro de Luzzi y después de Angong pusieron el 1-3 que finalizó el partido.
Pero aún tuvieron que esperar nueve minutos más: el árbitro del partido entre el Espanyol y el Nástic de Tarragona alargó el encuentro en casi diez minutos. Un gol del Espanyol les hubiera dado el triunfo, pero finalmente fueron incapaces de ganar a los tarraconenses y acabaron perdiendo un título que tenían prácticamente en el bolsillo.