La triste despedida de temporada del Oviedo
Los azules cierran en Tenerife una temporada decepcionante con la certeza de que habrá renovación profunda. El futuro de Ziganda sigue en el aire
Con el fallecimiento de Arnau condicionando el tramo final de temporada y dejando al Oviedo hundido en lo anímico, el club debe ponerse manos a la obra cuanto antes para empezar a planificar el proyecto del próximo año, en el que el conjunto azul está obligado a dar un paso adelante. La actual campaña, a falta del cierre en Tenerife, se salda con un decepcionante papel, con el equipo durante todo el curso más cerca de los puestos de peligro que de las posiciones punteras.
El juicio del año no puede ser positivo. El Oviedo, al menos, ha logrado evitar problemas clasificatorios a tres jornadas del final, tiempo suficiente para ponerse manos a la obra con el siguiente proyecto.
La decisión más esperada en estos momentos, además de saber quién relevará a Arnau como director deportivo, es conocer si José Ángel Ziganda seguirá como entrenador del conjunto carbayón. El técnico, tras año y medio en el Oviedo, afrontaría su tercera campaña en el club azul, con la sensación de que conoce el proyecto y que mira siempre que puede por la gente de la casa.