LAS PALMAS
Aythami Artiles, el regreso de un trabajador silencioso
El capitán amarillo volvió a pisar el verde del Gran Canaria seis meses después tras superar una lesión que le ha traído de cabeza durante todo este periodo.
Recuperó la sonrisa, se calzó las botas y volvió a portar su brazalete el “Kaiser” de Arguineguín, Aythami Artiles, ante el Albacete, medio año después de su última aparición con la camiseta amarilla en partido oficial, desde que lo hiciera ante el CD Mirandés en el Estadio de Gran Canaria el pasado 25 de noviembre de 2020, hace justo hoy seis meses. El veterano central completó los 90 minutos en un partido muy cómodo para coger rodaje en este final de temporada.
Tras meses de duro esfuerzo en el gimnasio, con 35 años a sus espaldas, el capitán cumplió con su palabra y llegó antes de que acabara la temporada para, por fin, terminar su particular vía crucis que comenzó a principio de curso. El canterano amarillo llevaba sin jugar desde noviembre por unas molestias en el tendón de Aquiles, a pesar de que, como él mismo afirmó recientemente “desde que empezaron las molestias a principio de liga, he estado jugando infiltrado y con dolores”, hasta que su cuerpo dijo basta.
Entonces paró y, aún así, lo intentó todo y, aprovechando el parón invernal, bajo un tratamiento conservador, esperó una recuperación milagrosa que no se produjo, como comentó a la prensa explicando que “hemos hecho algún tratamiento que no funcionó y al final decidimos operarnos y han sido tres meses que en mi cabeza todos los días estaba la idea de recuperarme, entrenar fuerte y en reaparecer lo mejor posible”. Así, tuvo que ser intervenido de su tendón de Aquiles el pasado 22 de enero, con un periodo de recuperación de entre tres y cuatro meses. Finalmente, los plazos se cumplieron a rajatabla gracias a su esfuerzo y llegó a final del mes de mayo, quizás más tarde de lo que él esperaba, con solo dos partidos por delante, como son Albacete y Logroñés, aunque ya formó parte de la convocatoria del equipo contra el Sporting.
Desde que se reincorporara a los entrenamientos grupales a finales de abril, tanto el cuerpo técnico como él mismo han ido con mucho cuidado en su puesta a punto y vuelta a los terrenos de juego. No había prisa ni nada más prioritario que recuperar al 100% ese tendón y así parece haber sido por las sensaciones que tuvo el del Arguineguín al finalizar el encuentro, cuando manifestó en la radio oficial del club que "estoy contento porque llevaba seis meses sin jugar. Creía que no iba a terminar la temporada, pero nos hemos empeñado –fisios, médicos, readaptadores...- en estar antes de terminar. Me dolía todo menos la lesión. Estoy contento por jugar y por ganar”.
En cuanto a estos meses de lesión y ese trabajo oscuro que nadie ve explicó que “hay muchos momentos malos. Al final, el día a día con los compañeros, mi familia, mis hijos… Todos ellos han estado conmigo en los peores momentos y estoy contento. Los chicos también están contentos porque jugué. Ahora, a acabar de la mejor manera el fin de semana".
Renovación con la UD
Ahora, con solo el partido del próximo domingo ante el Logronés por delante, el central amarillo, que acumula este año solo 11 partidos y 972 minutos en su haber, a sus 35 años, y el final de su contrato, se sinceró afirmando que "hay que ser realistas en la vida y en el fútbol. Ahora llega una edad en la que te tienes que cuidar. Exceptuando a algunos como Valerón o Rubén Castro, la gente normal tiene que cuidarse mucho. A mí me gustaría seguir otro año y, si no se puede, seguir jugando y ligado al fútbol. Me encontré bien. Las sensaciones han sido buenas y eso quiere decir que voy a seguir".
Como ya lo dijo hace unas semanas: “Solo pienso en recuperarme y la renovación me queda lejos. Mi sueño es seguir aquí y retirarme aquí”. Con 274 partidos con la camiseta de la UD y esta finalización de contrato el 30 de junio, habrá que ver si tanto el cuerpo técnico como la secretaría técnica consideran que debe alargar su estancia en la entidad hasta 2022. Por el momento, sus números le avalan, ya que, hasta la lesión, en el pasado mes de noviembre, el capitán había jugado este curso 882 minutos repartidos en diez partidos, todos ellos como titular, y, como se ha visto posteriormente, con su marcha del once el equipo cayó en desgracia siendo el más goleado de la categoría durante buena parte de la temporada. Su figura, hoy por hoy, es indiscutible en el eje de la zaga.