Emotivo adiós al niño Saúl

Si a las 19:03 el Atlético dedicaba su Insider del partido en Valladolid a Saúl Bachiller Román, el niño fallecido el sábado, cuando se dirigía a Neptuno a celebrar el título de Liga rojiblanco, en un párking cercano. A las 19:30 comenzaba el otro homenaje, el que le dedicaba su club, el CD Fairplay Parla, donde Saúl jugaba en su equipo de Infantil. Fue un acto emotivo, cercano y tristísimo, en el que el Atlético como club no faltó. Lo representaron dos históricos como Luiz Pereira y Cacho Heredia. También estuvo Futre, pero a título personal, porque está en Madrid y no quería faltar.

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Saúl estaba presente en cada detalle de la hierba del Complejo Alfredo Di Stéfano, en ese violonchelo que sonaba en su honor, estudiaba música, en ese 13 que podía leerse en dos globos dorados, su edad, en el abrazo de todos los niños de su equipo a su hermano Iker, mellizo de Saúl y también jugador del Infantil del club. Su otro hermano y su padre también estuvieron presentes. El presidente del Fairplay les dedicó unas palabras de apoyo y condolencia, además de agradecer todas las muestras de cariño y dolor que han recibido estos días, desde que el pequeño falleció de manera trágica, al sacar la cabeza por la ventanilla de la furgoneta en la que viajaba y golpeársela con un muro del párking de Santa Ana.

Paula, la conductora del coche, escribió una carta llena de tristeza, "muy sentida, muy triste, muy dolorosa", según describe una de las madres presentes, con la voz aún rota, que encogió el corazón de todos los presentes y que leyó una de las madres de los niños presentes. Un corazón de velas con un balón en el centro que era un abrazo al cielo, como ese que todos los niños presentes le dieron a Iker Bachiller Román en un momento del homenaje como si fuera al propio Saúl, mientras le entregaban flores. Neptuno, el sábado, cuando Koke le enfundó la bufanda que declaraba el título de Liga del Atlético llevaba un crespón negro. En su honor. Descanse en paz.