Marcelino desea tener a los 22 de plantilla al inicio del verano
Confía en empezar el trabajo ya sin los descartes, aunque sabe que es muy difícil. Arrancará sobre el 5 de julio y programará una semana de concentración en el extranjero.
El Athletic lleva casi un año y medio agotador, coincidiendo con la pandemia. El confinamiento en marzo de 2020 le pilló en plenos preparativos para la final de Copa y luego se ha ido arrastrando todo, esa cita con la Real, que se unió a otra final de la presente edición y la Supercopa, y la disputa en junio y julio de las jornadas pendientes. Así que hay ganas de acabar, de echar el telón mañana en Elche. “Cuando llega este tramo y si no te juegas nada, después de convivir con los jugadores y saber toda la paliza, la vorágine de partidos que llevan sobre todo desde enero a esta parte, bienvenido sea que finalice la competición. Es lo mejor para todos, olvidarnos del fútbol y volver con aires renovados para enfocar una temporada ilusionante”, sostiene Marcelino.
Es evidente que los jugadores piensan ya en la playa y las chancletas. “Sí que palpo que tienen ganas de vacaciones, si dijera lo contrario, mentiría. Hay muchísimas lesiones, jugadores que llevan un tramo con molestias... tiene enorme mérito que estos futbolistas se hayan vaciado ante una temporada con tanta exigencia”.
El técnico asturiano ya ha avanzado que quiere 20 jugadores de campo para el curso venidero, o 21 como máximo. Eso obligará a sacar a unos diez. Una locura. No va a meter mucha presión, pero sí pide que se dé prisa Alkorta, el director deportivo. “Cuanto más excesivo sea el equipo al inicio, menos posibilidad de sacar rentabilidad a la pretemporada habrá. Uno quiere tener a lo que es la plantilla definitiva lo antes posible, ¿cuántas veces lo he logrado en mi trayectoria reciente? Muy pocas”, refleja.
La idea de Marcelino es empezar a trabajar cinco semanas antes del inicio de la próxima Liga. Dado que esta arranca a mediados de agosto, la actividad en Lezama tendría lugar sobre el 5 de julio. Los jugadores disfrutarían de 48 días de asueto. Habrá partidos en el extranjero y, como ha pasado en los últimos años, se saldrá a realizar una estadía, “si podemos salir una semana, nos vendría bien separarnos un poco de las instalaciones habituales”.
Ya tiene en la cabeza qué bajas propondrá (Herrerín acaba contrato y Kodro, Iñigo Vicente y Córdoba tienen muchas opciones de salir), pero aún no las ha comunicado y por eso no las hace públicas. “En este club tenemos que estar amparados por la cantera, el exceso de futbolistas en la primera plantilla hace un tapón”, justifica. Tiene idea de subir dos o tres cachorros en verano para probarlos.
De cara a su segunda campaña en San Mamés, espera que se cumpla la línea ascendente de su carrera. “Nuestras experiencias indican que las segundas temporadas son mejores que las primeras, quitando un par de años por cuestiones externas, como un proceso concursal y otra etapa de dificultad máxima”. A partir de ahí, sabe que este año deja cosas por hacer. “Si no tuviese la absoluta seguridad de que tenemos que mejorar los números, sobre todo en Liga, no empezaríamos. Tenemos el convencimiento de que el equipo va a empezar a un gran nivel”, subraya.
Pero el pescado aún no está vendido, queda defender el escudo en el Martínez Valero y respetar con espíritu deportivo a implicados en la permanencia. “Tenemos que competir porque es nuestra obligación como profesionales –agrega García Toral-, defendemos a un gran club y en la máxima de un deportista está salir a ganar”. El Elche no depende de sí mismo, pero tiene opciones de salvación, y el preparador de Villaviciosa no quiere que se repita el despiste de El Alcoraz: “Quiero que se vea un equipo competitivo, con ambición e ilusión. Espero ver otra versión en el juego de ataque. En el partido de Huesca no estuvimos bien, no hay nada que reprochar en cuanto a esfuerzo, los números dicen que estuvimos en los parámetros habituales”. Y remarca que el equipo de Escribá, su sucesor en el Villarreal, “se juega todo lo que le queda, sus últimos 90 minutos para intentar quedarse en Primera”.
Además, Marcelino alienta para que el filial ascienda a Segunda este fin de semana ante el Burgos en Extremadura. “Yo quiero lo que el club desee, tiene experiencias previas y sabe lo que es más positivo. Me extrañaría que todos dentro no pensemos que la mejor solución es ganar, y más si estamos haciendo a los chicos ganadores. Se lo han ganado, jugar una final, y tienen el absoluto apoyo para conseguirlo. Nosotros hemos dado muestras suficientes de anteponer un interés del Bilbao Athletic que el nuestro, sin completar la convocatoria”.
Su última referencia fue una aclaración sobre su pensamiento de que “no se puede identificar a Williams con el gol”. Se refería a que no tiene un perfil como Aduriz, Llorente o Urzaiz, que son rematadores “y él no”. Al mismo Villalibre lo detecta más como un finalizador. Iñaki tiene otras virtudes previas a esa definición, considera.