Román Albarrán: "La entrada es nominativa, personal e intransferible"
El jefe de taquillas del Real Mallorca explica los detalles de la vuelta de público al estadio de Son Moix.
La distancia de seguridad es la clave de la vuelta de público a los estadios y en el caso del Mallorca la normativa lleva a la máxima expresión este capítulo como cuenta el jefe de taquillas del club balear, Román Albarrán: "se abre todo el estadio, la tribuna principal, Sol alta y baja, la grada Lluis Sitjar (supletoria en el fondo norte), fondo sur y la denominada grada visitante para favorecer las distancias".
En declaraciones a IB3 Ràdio, la radio autonómica balear, Albarrán recuerda que ya en la Navidad pasada "había un protocolo preparado por si se daba el caso, pero ahora aquel protocolo ha tenido que adaptarse al momento actual y a los requisitos que nos han pedido como por ejemplo la distancia social de un metro y medio, y eso nos ha condicionado el aforo porque hay que dejar ese espacio a la derecha, a la izquierda, por arriba y por abajo del asiento ocupado".
Román Albarrán añade que "tenemos más de doce mil abonados, 12.350, y la manera más equitativa de hacer la distribución es a través de un sorteo ante notario que dará los 4.086 aficionados que podrán entrar y que se anunciarán el sábado entre mediodía y la tarde".
El máximo responsable del taquillaje del Real Mallorca deja muy claro que "la entrada es nominativa, personal e intransferible y no se puede ceder a otra persona que sea la elegida por el sorteo".
Finalmente, otra de las claves de seguridad es la entrada al estadio de manera escalonada: "lo marca la LFP y sanidad: una hora y media antes del inicio del partido abriremos las puertas y los accesos y en cada entrada irá indicada la hora de entrada al reciento que será un grupo una hora y media antes, otro grupo una hora antes y otro cuarenta minutos antes".
Sin duda una experiencia nueva tanto para los aficionados como para los empleados del club balear y del servicio de seguridad que además dispondrá de un dispositivo especial para evitar salidas de espectadores al césped en caso de que se produjera el ascenso a Primera del equipo bermellón que para ello tiene que ganar su partido ante el Alcorcón siempre que el sábado se hubiera dado el caso de que el Almería perdiera ante el Albacete.