Escobar: "Croacia es una fuente inagotable de talento"
Tras firmar la permanencia del HNK Šibenik la 1. HNL croata, el castellonense Sergi Escobar atiende a AS para valorar la que está siendo su segunda aventura en el extranjero.
Cuando una puerta se cierra, otra se abre. A pesar de lograr el campeonato colombiano con América de Cali, Sergi Escobar (Almassora, 1975) regresó a España para estar más cerca de su familia. Y fue eso, su decisión de abandonar Colombia, lo que le permitió estar disponible cuando el HNK Šibenik llamó a su puerta en busca de un entrenador que pudiera ayudarle a eludir el descenso. Krunoslav Rendulic, que llevó al equipo a Primera tras ocho años lejos de la élite, dejó su sitio al español y este cumplió el objetivo con dos jornadas de antelación. Tras lograr la permanencia, Escobar afronta tranquilo un final de temporada en el que se medirá a dos gigantes como Hajduk Split y Dinamo Zagreb.
"Estuve cerca de entrenar a un equipo importante -el Castellón le valoró como sustituto de Óscar Cano-, pero no salió y la oportunidad de dirigir en la liga croata era un tren que no podía dejar escapar. Me llamaron un viernes y el domingo ya estaba en Šibenik", desvela Escobar, que se puso al frente de un equipo "anímicamente fastidiado" que encadenaba siete partidos sin ganar. Según Transfermarkt, el HNK Šibenik cuenta con la plantilla menos valiosa de la Primera División croata, un hándicap al que Sergi Escobar se sobrepuso con trabajo y análisis: "Encajaban mucho a balón parado y sufrían en los centros laterales. Quedaban 10 jornadas para el final y no podíamos abarcarlo todo, así que nos centramos en detectar fortalezas y debilidades".
Antes de la llegada de Sergi Escobar, Šibenik cayó goleado frente a Osijek (0-4) y encajó tres goles (3-2) por parte del colista. Con el español en el banco, el cuadro naranja recibe un tanto por encuentro y logró la permanencia tras imponerse, manteniendo la portería a cero, a dos rivales directos como Slaven Belupo (2-0) e Istra 1961 (1-0). Todo con el presupuesto más bajo de la categoría y una plantilla repleta de jugadores jóvenes que están en el punto de mira de media Europa. "A Marko Bulat, que es nuestro capitán y solo tiene 19 años, lo fichó el Dinamo Zabreg por más de 2 millones de euros. Deni Juric tiene ofertas de equipos de Noruega y de la MLS y le siguen desde España. Como a Emir Sahiti, que tiene detrás a un equipo de Segunda que va a jugar la próxima temporada en Primera. Mario Curic también tiene muchísima calidad. Croacia es una fuente inagotable de talento", destaca Escobar, que también cuenta a sus órdenes con el español Álvaro Martín, cedido por un Real Madrid con el que conquistó la Youth League: "Tiene mucha calidad, pero debe bregar mucho para estar físicamente a la altura".
Sergi Escobar, a quien acompaña como asistente su compatriota Jacint Guimera, confiesa estar "muy a gusto y súper contento" en Croacia, aunque se muestra apenado por que la oportunidad de entrenar en la élite le haya llegado lejos de casa. "Ojalá tenga opciones de entrenar en España. Si no, seguiré trabajando fuera porque el nivel es también altísimo". El de Almassora, autor del ascenso del Castellón a Segunda B en 2018, reconoce que uno de sus grandes objetivos es volver a dirigir al equipo de su tierra: "Antes o después volveremos a encontrarnos. Estamos destinados a entendernos". Su presente, sin embargo, está en Croacia: "Aún no nos hemos sentado a hablar con el Šibenik pero, tal y como están yendo las cosas, va a ser muy fácil renovar".