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BARCELONA-ATLÉTICO

Griezmann, en su punto

El francés ha intervenido en 24 goles en 2021 (14-10), por sólo once de Suárez (11-0). Está enchufado y ha aparecido últimamente en los partidos importantes.

Actualizado a
Griezmann, en Mestalla.
Jose Miguel Fernandez de Velasco©GTRESONLINE

Empiezan a quedar lejos los días de Antoine Griezmann (21-3-1991) en el Atlético de Madrid, donde fue un futbolista apreciado que alcanzó la cima mundial. También empiezan a acallarse las críticas feroces que recibió en su primer año y medio en el Barcelona. Griezmann llega a uno de los partidos decisivos de LaLiga después de un principio de 2021 espectacular, en el que ha mercado 14 goles y ha dado 10 asistencias. Si a principio de temporada, sus números, más pobres, se comparaban con los espectaculares de Suárez de rojiblanco, en el nuevo año la moneda ha dado la vuelta. El uruguayo ha marcado once goles y no ha dado un solo pase de gol en el nuevo año. Así que mientras Griezmann ha intervenido en 24 goles este 2021, Suárez apenas lo ha hecho en once. Una gran diferencia.

Griezmann, además, está apareciendo en los días grandes.Ya lo hizo en la Supercopa, pese a que el equipo no le acompañó y sus dos goles en la final ante el Athletic cayeron en el olvido. El francés también hizo el gol difícil de la final de Copa, el 1-0. Y ha estado en las remontadas coperas de Granada (dos goles y dos asistencias claves) y del Sevilla (pase decisivo a Piqué en el 2-0). En las dos últimas salidas, Villarreal y Valencia, también ha sido fundamental en los triunfos que han mantenido al Barça en la carrera.

Puede que, a estas horas, Koeman aún se pregunte por qué no le ha dado la camiseta de titular en ninguno de los dos partidos contra el Madrid, saldados con dos derrotas. En el fondo, Griezmann ha sentido momentos de desconfianza en todos sus entrenadores en el Barça. Valverde, que pidió su fichaje, pareció no tener claro dónde ubicarle en sus primeros meses; Setién nunca le tuvo fe y se dejó manejar por los pesos pesados del vestuario hasta dejarlo fuera del partido contra el Atlético y del desastre de Lisboa. Finalmente, a Koeman también le ha costado encontrar su acomodo pese a que llegó con buenas intenciones en verano. Pero el 3-4-2-1 ha beneficiado a Griezmann. Cuando ha jugado paralelo a Messi y detrás de Dembélé se le ha visto disfrutar; y cuando ha sido el jugador más adelantado como en Valencia, Villareal o La Cartuja ante el Athletic, ha cumplido. Está con todas las luces encendidas, ha empezado a entenderse con la mirada con Messi y tiene hambre de títulos. Si el Barça quiere LaLiga, contra el Atlético necesita a sus estrellas. Y Griezmann parece en su punto perfecto de cocción.