El Deportivo pone fin a su calvario con una goleada
El Depor arrolló al Langreo con goles de Miku (2), Granero, Borges y Adri Castro en un gran segundo tiempo. La victoria certifica su presencia en Primera RFEF.
El Deportivo tenía su primera oportunidad de poner fin a una angustia casi eterna ante el Langreo. Tenía su primer ‘match ball’ para sellar su permanencia en Primera RFEF tras el empate del sábado entre Racing de Ferrol y Numancia. Y esta vez, no falló, ni mucho menos. Los de Rubén de la Barrera firmaron la victoria más amplia de toda la temporada al golear al voluntarioso Langreo con tantos de Granero, Borges, Adri Castro y un doblete de Miku. Un triunfo lúcido e indispensable que termina con un calvario que parecía no tener fin. No es que haya logrado un enorme éxito porque el único objetivo de la temporada era el ascenso, pero tal y como se habían sucedido los fracasos en los últimos años es todo un alivio para construir el futuro bajo la batuta de Abanca a un solo peldaño del fútbol profesional. Un futuro que ya tuvo su primer mensaje al comprobar como Borges, Uche y Beauvue comenzaban el partido decisivo sentados en el banquillo.
La paz blanquiazul llegó además en un Riazor que recibió en sus gradas a 5.000 aficionados, la mejor entrada de la temporada tras el alivio de las restricciones. 5.000 socios que disfrutaron y arroparon hacia la sexta victoria consecutiva de su equipo que ha compensado en su estadio sus pobres registros como visitante. La grada se encontró con un once muy ofensivo de Rubén de la Barrera y un Langreo sin complejos que se tradujo en un inicio frenético con un Raí lanzado que rozó el primero a los once minutos con un gran disparo que repelió Dennis. Tras la electricidad llegaron las imprecisiones en una fase sin un dueño claro que trasladó la batalla a la media, el territorio del pulmón Villares. Y así hasta el minuto 29, en el que tras mil y una pérdidas recíprocas, el balón llegó a Héctor. El lateral rompió la línea, centró desde el fondo y Miku, adornándose con el tacón, abrió el marcador en el área pequeña. El gol no relajó el choque, de constante ida y vuelta, pero las mejores ocasiones antes del descanso fueron de nuevo locales con Rayco y Miku de protagonistas.
El reto en el segundo tiempo para el Depor era ampliar el marcador para evitar sustos. Y los blanquiazules tardaron 30 segundos en hacerlo. Héctor repitió de asistente, esta vez de falta lateral, para que Granero marcase de cabeza su primer gol de la temporada. El segundo tanto alivió a la grada, que comenzó a disfrutar, serenó a los coruñeses e hizo mella en la moral de un Langreo honrado e intenso, pero que no se jugaba nada. Los de Rubén de la Barrera pasaron a dominar el ritmo y a llegar con nitidez al área asturiana una y otra vez. Lara perdonó una clarísima, pero un poco después Miku, no. El venezolano marcó su séptimo gol de la temporada en un mano a mano ante Dennis tras una gran asistencia de Rayco. El ansiado día de fiesta siguió cuando en el minuto 76 Celso Borges clavó en la escuadra una falta al borde del área. Golazo del tico. Y para que el día fuese perfecto, estreno goleador del canterano Adri Castro sobre la bocina para firmar la mayor goleada de la temporada y ponerle el broche de oro a una campaña de bronce. Un buen recuerdo para la afición en el último partido del año en casa de cara al futuro, de cara al único objetivo que habrá el curso que viene: ascender.