La Real llega en la misma situación al final liguero que la temporada pasada
Tiene los mismos puntos y ocupa la misma posición a falta de siete jornadas. Por repetir, calca hasta las sensaciones y las lesiones.
La Real Sociedad llega a las últimas siete jornadas del campeonato nacional de Liga con los mismos números y la misma situación clasificatoria que la temporada pasada. Casualidades que siempre depara el fútbol, todo es calcado. El equipo de Imanol Alguacil tiene los mismos puntos y ocupa la misma posición que la campaña anterior. Los realistas suman 47 puntos y son séptimos en las clasificación, a dos puntos del quinto clasificado, exactamente igual que hace un año. Pero curiosamente calca también las sensaciones con las que llega a este tramo final de LaLiga.
Y es que si hace un año, después del confinamiento, la Real Sociedad evidenciaba síntomas de cansancio y agotamiento que dificultaban que hiciera el fútbol atractivo y dinámico que había practicado hasta el confinamiento; ahora da la sensación de que llega bastante justo de fuerzas al tramo decisivo de la temporada. Las sensaciones son muy parecidas, también porque los donostiarras vuelven a tener bajas muy importantes en la medular que condiciona su forma de jugar. Ya no tiene tanto la pelota y le cuesta generar ocasiones claras de gol, como quedó demostrado en la segunda parte contra el Sevilla en esta última jornada. Hace un año Imanol no pudo contar con su capitán, Asier Illarramendi, al que parecía recuperar para la causa durante el confinamiento, pero que nada más volver a los entrenamientos se rompió de nuevo. Y en esta temporada le ha vuelto a pasar lo mismo. Después de un largo proceso de recuperación, el mutrikuarra estaba listo para volver a aportar con regularidad, pero de nuevo una inoportuna lesión antes de la final de Copa le deja fuera de juego.
Pero en cuestión de bajas la casualidad va mucho más allá. El curso pasado perdió para las últimas jornadas a Martin Ødegaard, que era el jugador clave entre líneas a la hora de dar el último pase; y esta temporada le ha pasado exactamente lo mismo con David Silva, el jugador llamado a ejercer esa función en la mediapunta. Pierde de esa manera ultimo pase y capacidad para sorprender. A esto hay que añadir que no sabe cuándo pondrá contar con Mikel Merino, que se trata de otra baja de mucha relevancia. El fútbol es demasiado caprichoso. El año pasado la Real parecía llegar muy cansada a la recta final después del esfuerzo realizado en enero y febrero para alcanzar la final de Copa. Y esta temporada le pasa factura su presencia en la Europa League, y la exigencia de jugar competiciones como la Supercopa y la final de Copa ganada al Athletic Club.
Así que como todo parece ir de la mano con respecto al curso pasado, habrá que mirar a los puntos que sacó la Real para clasificarse para la Europa League in extremis en las ultimas siete jornadas. El equipo de Imanol fue capaz de sumar nueve puntos de los últimos 21, lo que le sirvió para meterse con 56 puntos en la fase de grupos de la Europa League como sexto clasificado. Este año parece que le puede servido con algo parecido para asegurar Europa, aunque la lucha por la quinta y sexta plaza vuelve a estar muy igualada, como ocurriera la pasada campaña.