Confianza ciega en Sergio Araujo
Continúa siendo imprescindible para Mel pese a que en 2021 solo haya marcado un gol habiendo sido titular en todos los partidos menos en uno (sancionado).
Siempre tuvo claro que Pepe Mel que Sergio Araujo, quien vive su tercera etapa en Las Palmas tras sendas cesiones al AEK ateniense, debía ser un jugador fundamental en sus esquemas. Se lamentaba además el entrenador hace unos meses cuando sostenía que, pese a iniciar su segunda temporada completa en Las Palmas, "realmente era la primera vez" que podía contar con el delantero argentino.
Dicho y hecho, Araujo ha contado para Mel siempre que ha estado sano, convencido el entrenador del factor diferencial que le puede aportar el argentino, del que además se valora su polivalencia en el frente de ataque amarillo, lo mismo delantero que mediapunta, también extremo ocasional. Así, tras superar el COVID-19 y sus secuelas, más repetidos problemas musculares, el 'Chino' ha jugado de momento 19 partidos, 15 de ellos como titular, para un total de 1.218 minutos sobre el césped.
La apuesta de Mel por Araujo se ha hecho todavía más patente en 2021. Así, en lo que se lleva del presente año, ha sido titular en 11 de los 12 partidos envites disputados por Las Palmas, ausente únicamente ante el Rayo Vallecano (1-1) y porque fue expulsado días antes en Castellón en otro descalabro amarillo (4-0).
Pese a que únicamente ha metido un gol en el presente año, el decisivo en Mallorca (0-1, 10-01-2021), no hay quien le saque del equipo titular. Menos ahora, cuando Las Palmas, salvo Cedrés, que anda afanándose en la recuperación de su quebrada rodilla, tiene a todo su arsenal ofensivo disponible: Jesé, Mujica, Espiau, Rober, Araujo, Clemente, Kirian, Maikel Mesa…
Entre sus compañeros cunde la sensación de un notable esfuerzo no recompensado en forma de goles, empeñado como parece en estar lo mejor posible físicamente. "Araujo parece que es de goma, lo aguanta todo", sostiene uno de sus compañeros. Pese a su sequía goleadora, camino ya de los tres meses, también le cayó en gracia a Pepe Mel, de quien se ganó su confianza ciega. En el doble compromiso local de Las Palmas de esta semana, ante Lugo y Mallorca, se le exige el paso adelante que no termina de dar. Los galones mandan.