Demasiados mediapuntas

El Madrid posee una mina de mediapuntas. O un almacén, como quiera verse. Entre los que están en la actual plantilla y los que tiene cedidos en otros equipos, el conjunto blanco es capaz de armar un once titular completo, portero incluido, compuesto únicamente por hombres de ataque sin la función específica de delantero centro. Los múltiples refuerzos acometidos en esa demarcación en los últimos años han desembocado en una acumulación de efectivos con perfil ofensivo.

El radar blanco en el mercado detecta la señal de los mediapuntas con más intensidad que las de otros futbolistas con diferentes condiciones. El equipo dispone de seis futbolistas con esos rasgos: Isco, Hazard, Asensio, Lucas Vázquez, Vinicius y Rodrygo. Y tiene cedidos a otros cinco: Odegaard, Reinier, Bale, Kubo y Brahim. Un desequilibrio que contrasta con el panorama en la sala de máquinas, donde Zidane sólo cuenta con Casemiro, Modric, Kroos y Valverde. El alemán y el uruguayo son duda para recibir el sábado (16:15, Movistar LaLiga) al Eibar.

Esa abundancia hace que el entrenador francés disponga de más versatilidad en ataque que en ninguna otra línea del dibujo. En defensa tiene las posiciones dobladas, incluyendo la contribución del polivalente Nacho y a lo que se suma la consolidada reconversión de Lucas Vázquez al lateral derecho. La medular, en cambio, es la zona más magra del equipo. Cualquier contratiempo de los cuatro jugadores específicos deja sin posibilidad de elección a un Zidane que ahora explora la posibilidad de alinear a los cuatro.

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Ese desequilibrio hace que el técnico goce de infinidad de alternativas delante, tanto a la hora de elegir los nombres que acompañan a Benzema como en la opción de retocar su dibujo hacia un 4-4-2 y jugar con un hombre por detrás de los dos jugadores más avanzados. Parco en cambios esta temporada, en muchos partidos las sustituciones de Zidane se han ceñido a los efectivos de vanguardia. El doble cambio de los extremos ha sido una opción recurrente, hasta el punto de que cuatro de ellos (Asensio, Vinicius, Rodrygo e Isco) han protagonizado, en un sentido u otro (sustituido o sustituto), 80 de los 125 cambios (el 64%) que ha realizado el preparador blanco esta campaña. Y ninguno de ellos está entre los siete con más minutos de la plantilla. El octavo, con 2.557', es Lucas Vázquez, que se ha desempeñado principalmente como lateral. Asensio es noveno a un abismo (1.928').

Ante tal overbooking al Madrid no le queda remedio que buscar destino a los mediapuntas que tiene en cartera. Cinco de los nueve cedidos son de esas características. Unos, como Bale (de 31 años) u Odegaard (22) en busca de los minutos de los que no disfrutan en el Madrid. Otros, como Brahim (21), Kubo (19) o Reinier (19), quemando etapas en su formación para llegar un día a asentarse en el primer equipo... o ser moneda de cambio.

El valor de mercado conjunto de los cinco mediapuntas cedidos es de 107 millones de euros, según el portal especializado Transfermarkt. El que cuenta con mejor tasación es Odegaard, cedido el pasado invierno al Arsenal (es el cuarto préstamo del noruego desde que fichó por el Madrid) y valorado en 40 millones. Bale, al que el Madrid debe buscar un traspaso este verano si quiere sacarle rédito antes de que acabe su contrato en 2022, está valorado en 20 M€. Reinier en 18 M€, Kubo en 15 M€ y Brahim en 14 M€. Opciones para hacer caja si no encuentran acomodo en el vestuario y el club necesita recaudar para hacer frente a los deseados fichajes de Mbappé, Haaland o el regreso de Cristiano...