Aprobados y suspensos de Las Palmas: con la magia de Sergio Ruiz no basta
El buen hacer del cántabro no fue suficiente para que la UD rompiera el maleficio en la isla vecina después de tantos años.
Álvaro Valles. Nada pudo hacer en el gol de Vada. De resto, solventó muy bien un disparo de Zarfino en el minuto 32 y apenas tuvo trabajo en la segunda mitad. Muy seguro por arriba.
Álvaro Lemos. Tapado en la primera mitad, mejoró sus prestaciones en la segunda. Peligroso a balón parado y profundo por su banda siempre es un puñal, aunque hoy no tuvo protagonismo.
Eric Curbelo. Muy inseguro en la salida de balón, no fue su día. La defensa de la UD genera mucho miedo y el satauteño no se consolida a pesar de llevar muchos partidos en el centro de la zaga.
Álex Suárez. Al igual que su compañero, no acaba de generar confianza y cada ocasión rival es de verdadero peligro. Mucho que mejorar.
Dani Castellano. Lo de menos es su partido, que es de notable, ya que tuvo que ser sustituido en el minuto 60 después de un golpe en el costado que le hizo sangrar por la boca. Se le ha trasladado a un hospital y se está a la espera de diagnóstico.
Javi Castellano. Su hermano, en el regreso a la titularidad después de varias jornadas en el banquillo por Cristian Rivera, no tuvo su día. Lento, malo en la entrega y flojo en el ataque. Se lesionó al final.
Sergio Ruiz. La brújula de la UD. El cántabro volvió a salvar a los amarillos con un gol de bella factura al borde del descanso. A partir de ahí, dominó el centro del campo y su fútbol fue dueño y señor del Heliodoro, pero no encontró el acompañamiento de sus compañeros. Una pena.
Pejiño. Desde su actuación ante el Fuenlabrada ha desaparecido. Hoy lo intentó sin fortuna tanto por la izquierda, inicialmente, como por la derecha. Acabó sustituido.
Araujo. Empezó desasistido en la punta de ataque junto a Jesé hasta que Pepe Mel lo tumbó a banda izquierda. Ahí fue más protagonista y dispuso de varios lanzamientos desde fuera del área con peligro. Estuvo peleón, pero sigue negado de cara a portería.
Jesé. Empezó tímido, alejado de la zona de acción del juego y cuando quiso entrar en juego ya era demasiado tarde. Su actuación más floja desde que está en la UD. Fue cambiado y rompió el aparato que indica los cambios de los jugadores y los descuentos, eso es lo más destacable de él en el derbi.
Rober. Horrible. El extremeño entró y salió del derbi como si le hubiera pasado un tren por encima. Decía esta semana estar al 100% después de haberse recuperado del COVID-19 y la realidad es bien distinta. No está para estos duelos.
Jonathan Silva. Entró por al campo por el incidente de Dani Castellano y de diez cosas hizo once mal. Sigue muy verde y no demuestra el por qué de su fichaje, más allá de que viniera por el salario mínimo y una ficha sub-23.
Mújica. Tuvo en sus botas la posibilidad de cambiar la historia de los derbis en el minuto 85. Solo, en el punto de penalti, remató con la izquierda por encima del arco de Dani Hernández una ocasión clarísima que podía haber significado la victoria amarilla. Su actuación como revulsivo le vino mucho mejor que como titular.
Clemente. No se enteró de qué iba el derbi en lo que estuvo en el campo. Su velocidad en el juego dejó mucho que desear. Irrelevante.
Maikel Mesa. Apenas intervino en lo poco que estuvo en el terreno de juego, pero distribuyó los balones de los que dispuso con criterio. Quizás entró demasiado tarde.