Griezmann y Riqui, dos casos peliagudos en el Barça 2021-22
El primero puede estar en medio de la continuidad de Messi y el interés por Haaland; y el segundo no termina de convencer a los técnicos pero es un emblema de la cantera.
Además de la lista de jugadores transferibles del Barça, muy evidente y que componen siete jugadores (Neto, Umtiti, Júnior, Pjanic, Matheus, Coutinho y Braithwaite), hay dos casos muy peliagudos con vistas al Barça 2021-22, cada uno con sus peculiaridades. Son Antoine Griezmann y Riqui Puig. Asuntos delicados.
Griezmann ha estado en cuestión desde que llegó al Barça. Fuese por su controvertido documental de La Decisión en el verano de 2018; sea por las expectativas que generó por su altísimo precio, 120 millones de euros, sus méritos son discutidos. El delantero francés marcó 15 goles y dio sólo cuatro asistencias en 48 partidos la temporada pasada. Este curso ya lleva 14 goles y 11 asistencias en 40 partidos. Su rendimiento, pues, ha mejorado. Su participación en el 3-4-2-1, también. Estratégicamente, el fichaje de Griezmann siempre fue controvertido porque llegó al equipo del mejor jugador del mundo, que ocupa su posición preferida. Pese a ello, Griezmann había hecho 21 goles y 10 asistencias en su última temporada en el Atlético de Madrid. No está tan lejos de lo que ha hecho en el Barça, donde además su rol es menos protagonista (los goles tienen más mérito). Llamado a tener una nuena posición y más protagonismo cuando se conoció que Messi había enviado el burofax, ha vuelto a acoplarse a un equipo en el que sabe que no es el jugador franquicia. Griezmann cumple profesionalmente su trabajo, y hasta se diría que se le ve más feliz en el campo. Pero el Barça quiere un nueve, concretamente Haaland. Y aunque el fichaje parece una quimera, si alguien tiene mercado en el Barça es Griezmann. Más si Laporta decide atacar la renovación de Dembélé. Otra cosa es que el jugador quiera moverse. Por las noticias que llegan, no tiene demasiadas ganas. Lo que pase de aquí a final de temporada puede tener mucho peso en el futuro inmediato del francés, que el otro día demostró en la selección que está a muy buen nivel. La renovación de Messi, por supuesto, también afecta indirectamente a Griezmann. Si el argentino decidiera no seguir, Griezmann se convertiría en una pieza clave del engranaje del Barça 2021-22.
El otro caso delicado es el de Riqui Puig, un emblema de la cantera por su manera de entender el fútbol y al que, sin embargo, debe fallar algo. De Valverde a Koeman, pasando por Setién; e incluso en estos partidos de la Eurocopa Sub-21 en el que no está teniendo a minutos pese a que la Selección de De la Fuente tiene bajas como la de Pedri, no tiene continuidad. Los cuatro entrenadores, cada uno con su librillo, no le han encontrado sitio. No ha llegado a los 500 minutos esta temporada. Los técnicos también tienen ciertas dudas, pero la decisión de meter a Riqui en una lista de transferibles es tan delicada como poner en cuestión una manera de entender el juego y producir futbolistas, la de La Masia. Riqui se ha cansado de decir que no quiere salir del club y que está convencido de triunfar. Pero, además de su lío con el jugador ("eres un filtrador", publicó El País que le había dicho el chico de Matadepera), fue honesto y le recomendó siempre públicamente salir cedido en septiembre y en enero. Riqui ha preferido seguir en el Barça, al menos de momento, pero, por el camino, Ilaix también le ha adelantado. Y en ruta podría estar Wijnaldum. Más dificultades para Riqui quien, eso sí, también sabe que cuenta con un gran soporte mediático. No será un caso fácil de resolver este verano. Chicos que han hecho toda su carrera en el club, y que además mantienen su ilusión por triunfar, tienen que tener un trato deferencial. Y merecen tacto. De ellos, no obstante, también se espera una actitud colaborativa.