Turquía arrolla a Noruega en una mala tarde de Haaland y Odegaard

Veníamos para ver a Haaland y Odegaard… y nos encontramos con Tufan, Söyüncü y una Turquía formidable que arrasó a Noruega de principio a fin y se pone en posición óptima para volver a jugar un Mundial 20 años después. Tufan en dos ocasiones y Söyüncü abrieron una notable brecha con un adversario donde sus jugadores más ilustres no aparecieron. Haaland estuvo muy vigilado y bastante pasota; Odegaard, disperso y sin ideas. Los escandinavos acabaron además descolocados y con 10 jugadores por expulsión de Thorstvedt. Muy buen arbitraje del español Alejandro Hernández Hernández.

Como sucediera el pasado miércoles en Gibraltar, Noruega volvió a salir con su camiseta reivindicativa en solidaridad con los trabajadores de Qatar. Turquía sale como un cohete y a los 4’ un centro de Yazici, mal despejado por la zaga escandinava, es aprovechado por Tufan para anotar el 0-1.

El fútbol de Noruega es plano y sin ideas, Haaland está muy vigilado por Ayhan y cuando trata de buscar nuevas vías, el que aparece entonces es Söyüncü. De hecho, lo único que hizo la estrella del momento fue dar un pase de gol a Sorloth, que estaba en fuera de juego (el gol fue anulado) y disparar flojo a las manos de Çakir. Tampoco es que Odegaard hiciera mucho más.

A los 26’ Sorloth, jugador del Leipzig estrella un zurdazo en la base del porte izquierdo de Çakir. De un posible 1-1 se pasó en un suspiro al 0-2 cuando Söyüncü, central del Leicester, cabeceó a la red un córner sacado por Yacizi. Se llega al descanso con este resultdo, control absoluto de los turcos y sensación de que Noruega debe resetear.

Tras el descanso Solbakken, seleccionador noruego cambia a su portero Jarstein, poco afortunado, por Hansen. Los escandinavos salen volcados, pero sin orden y lo que llega es otro gol de los turcos a los 58’.Çalhanoglu da un pase atrás a Tufan. El centrocampista del Fenerbahçe, con un precioso disparo en rosca desde el borde del área, anota el 0-3, el segundo de su cuenta personal.

Con el marcador tan cuesta arriba, los escaandinavos esperan alguna genialidad de sus dos mirlos. Pero no es ni mucho menos su tarde. Haaland es un islote que conforme avanza el partido se va desconectando por momentos porque no le llegan balones para jugar o rematar y su inmenso talento brilla por su ausencia.

Noruega se desquicia y a los 79’ Hernández Hernández (que realizó un fenomenal arbitraje) muestra la tarjeta roja a Thorstvedt por una fea patada a Erkin. Viendo todo perdido, el técnico nórdico decide quitar a Haaland para dar entrada a Thorsby. El ‘23’ se retira con cara de muy pocos amigos. La derrota y la imagen son de las que duelen.