El penúltimo baile del Mudo
El virtuoso tanto de Franco Vázquez ante el Elche despierta halagos a las puertas de su adiós y tras una campaña repleta de irregularidad.
Franco Vázquez vivió su penúltimo capítulo de emociones en Nervión en la cita de ayer contra el Elche. Julen Lopetegui le entregó cuatro minutos de juego y los aprovechó para anotar un brillante gol de tacón que refleja mucho de lo que fue en el Sevilla durante las últimas temporadas. Su calidad individual irrumpió para cerrar el triunfo sevillista y acercar la Champions mientras él firmaba posiblemente su último gran regalo a la afición nervionense. Sumido en una campaña sin apenas oportunidades (67 minutos en Liga), el argentino mira al devenir a sabiendas que partirá este verano a la caza de otro destino tras varios años entregando su mejor versión en el Sevilla.
"Es un jugador muy especial y me alegro por él. Quizás fui injusto con este futbolista, merecía jugar más minutos". Así se expresó Julen Lopetegui, técnico del Sevilla, tras ser preguntado por la aparición estelar del Mudo ante el Elche. Su magia se elevó en Nervión sin que esta vez la afición pudiese disfrutar en vivo de su enésimo guiño al espectáculo. Su cabida en este proyecto fue diferente a la esperada hace un año, pero el jugador se quedó y disfrutó de los escasos minutos que Lopetegui le entregó a lo largo de un curso repleto de irregularidad. Intervino a pinceladas, a veces con altibajos, pero siempre bajo el marco de un talento que Nervión también echará en falta.
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El Mudo termina contrato este verano y su futuro podría estar ligado a un regreso a la Serie A. Durante el invierno pasado estuvo cerca de partir, pero finalmente decidió quedarse en Nervión y trabajar para sumar minutos como los del choque ante el Elche. Tras el duelo, sus lágrimas entraron en escena al ser preguntado por sus sensaciones en lo que pueden ser sus últimos momentos como sevillistas. Su taconazo dice mucho de él. También su emoción tras su penúltimo baile con el conjunto nervionense.