Fallece Carlos Matallanas
Exfutbolista, periodista, analista de fútbol y colaborador de este diario, Carlos Matallanas peleó contra la ELA, le dio visibilidad y dejó un mensaje de esperanza.
Carlos Alberto Gómez Matallanas (1981-2021) ha fallecido este martes a causa de la esclerosis lateral amiotrófica contra la que luchó sin descanso. Siempre ligado el fútbol como jugador y luego, a través del periodismo con AS y demás medios, la ELA fue su mayor rival al que combatió con esperanza, sinceridad y sin vergüenza, dando a conocer la realidad de una enfermedad de la que, según la Sociedad Española de Neurología, se diagnostican tres nuevos casos cada día.
Nacido en el barrio madrileño de Carabanchel, Carlos quería ser futbolista y lo fue. Se formó en el RCD Carabanchel y pasó por varios equipos del fútbol madrileño: Alcobendas, Santa Ana, Parque Europa, Fortuna, Puerta Bonita, Rayo Majadahonda, Pozuelo o Moscardó. Su carrera en el fútbol acabó en Cádiz, donde ahora residía, entre el Racing Portuense y la UD Roteña.
En 2014, su vida cambió. Como él mismo contó en El Confidencial, donde fue responsable de la sección de Deportes, le diagnosticaron la esclerosis lateral amiotrófica. La maldita ELA. Él, que se volcó en el fútbol, vio como el fútbol se volcaba con él en un arreón solidario. Su última vez con un balón fue en el Fernando Torres de Fuenlabrada, en 2014, rodeado de su familia. Su hermano Javier, periodista de esta casa entre ellos, estuvo en el verde. También con otra familia, la del balón, con Fernando Torres, Kiko Narváez, Jémez, Pantic, Alfonso, Pepe Reina, Mono Burgos, Petón, Camacho... Los beneficios del encuentro fueron donados a FUNDELA, la fundación que lucha contra esta enfermedad y de la que se convirtió en embajador. El deporte nunca dejó de apoyar: recibió homenajes de sus clubes y demás entidades deportivas, el CSD le concedió la Real Orden del Mérito de Deportivo y estuvo presente en cada acto que podía significar una ayuda.
Carlos colgó las botas, pero no se separó del fútbol. Estuvo en el organigrama de Fuenlabrada y Alcorcón como asesor y analista y también repasaba en sus columnas de AS cada punto de la actualidad que le parecía relevante. Historias que salían de su mente, por las que fue premiado, y sus pupilas tenían que trasladar al papel a causa del avance la enfermedad. Una que nunca le quitó el ánimo para mostrar su lucha a través de sus textos.
Esta quedó reflejada en sus libros. El primero fue 'Mi Batalla contra el ELA', un compendio de artículos que escribió en El Confidencial donde empezó su blog narrando su día a día de la enfermedad. Hace apenas unas semanas salió a la luz su segundo libro: 'La vida es un juego. Estrategia para Mario y Blanca'. Un manual de vida, de resilencia y de lucha siempre con el fútbol como hilo conductor. "He podido recordar en sus páginas las razones por las que sigo peleando", aseguró en la presentación. Un manual que le hacía especial ilusión y ahora, nos deja a todos como legado.
Con su amigo Fernando Torres grabó una charla sobre todo que titularon 'Fútbol y Vida' y que Jose Antonio Martín 'Petón' tituló '¿Quién dijo rendirse?' para que quedara en las estanterías para siempre.
Una tarde de hace varios diciembres, le gritó con su pizarra a un Palacio de los Deportes de Madrid abarrotado que "Todo va a salir bien" para dar esperanza. Porque eso era lo que Carlos transmitía. Nunca se despegó del balón y se fue, como él quiso, con sus botas de futbolista puestas.