REAL MADRID
El derbi que cambió la vida de Casemiro
En 2016, tras la primera derrota de Zidane contra el Atlético, el francés decidió cambiar su once y darle entrada el brasileño, que desde entonces es fundamental.
Es curioso que uno de los partidos que más ha marcado la carrera de Casemiro fue uno en el que no jugó. Fue un derbi disputado en el Santiago Bernabéu. Zidane, recién llegado al banquillo del Madrid, jugó su primer duelo contra el Atlético de Madrid con una idea de juego muy ofensiva, mezclando a muchos futbolistas de calidad como Kroos, Modric, Isco o James. Esto le había dado resultado en sus primeros encuentros, pero los de Simeone pincharon el globo superando al Madrid.
"Hay que meter más pierna", comentó Zidane en rueda de prensa consciente de que el talento no iba a ser suficiente contra los mejores. Lo bueno para él es que tenía la solución en casa, y se dio cuenta de ello. Justo el fin de semana siguiente, Casemiro entró en el once para darle consistencia al medio campo. El brasileño fue el encargado de sostener la BBC, intocable para Zidane durante sus primeros meses. No sólo aportó fuerza, sino también equilibrio táctico a un equipo que se rompía con facilidad sin él.
Esa temporada ya no salió del equipo. Paso de jugar 21 minutos en los primeros nueve encuentros con Zidane a ser titular en los siguientes 15 en los que estuvo disponible. Entre ellos, todos los de la fase elimiantoria de la Champions (incluida la final contra el Atlético) y el Clásico en el Camp Nou que ganó el Madrid 1-2. Desde entonces, se ha convertido en un jugador fundamental.
Líder del vestuario
Cabe recordar que Casemiro tuvo que marcharse cedido para después volver y triunfar en el Madrid. Llegó desde el Sao Paulo en 2013 a cambio de 6 millones de euros y el club lo cedió un año después al Oporto, donde empezó a ser un futbolista capaz de rendir a la perfección en un grande.
Case (como lo llaman en el vestuario) se ha convertido en estos años en uno de los referentes del equipo. Ha asumido liderazgo hasta tal punto que es de los que más dirige a sus compañeros dentro del campo. Su relación con Zidane es muy estrecha: el francés confía ciegamente en él y es muy consciente de la importancia que tiene en el sistema. También tiene una gran relación con el presidente, Florentino Pérez.
Contra el Atlético jugará su partido 271 con la camiseta blanca, en los que ha marcado 29 goles y ha dado 20 asistencias. Si juega 13 más superará a Hugo Sánchez y entrará en el top-10 de futbolistas extranjeros con más partidos en la historia del club.
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