Elizegi saca sus cuentas pero los socios rechazan su gestión

A la segunda, Elizegi ha logrado sacar adelante sus cuentas, tanto las del pasado ejercicio como las del actual. El presidente quiso astutamente sacar un primer punto en el orden del día de la Asamblea Extraordinaria, a diferencia de la Ordinaria que le tumbaron el 27 de diciembre: dejó a los socios compromisarios la posibilidad de que mostrasen su malestar en un juicio a la gestión. Y desligó esa cuestión de las cuentas del curso pasado y el presupuesto del actual. Así ponía en bandeja una especie de ejercicio con el corazón, para desahogarse, y otro con la cabeza, apelando a la responsabilidad de la masa social, como ha hecho un diario que ha estado enfrente de esta directiva durante este tiempo, en una editorial sorprendente, alentada desde el PNV como una tregua para avanzar. Estatutariamente no supone nada echar abajo la gestión, pero sí les pone sobre aviso que más les vale hacer caso a navegantes, aunque en abril se renueva la planilla de compromisarios.

Finalmente la asistencia ha sido de 771 compromisarios, sobre 939. La gestión de la junta ha sufrido un varapalo reseñable en una Asamblea telemática que introducía la posibilidad de ser presencial para los que no pudieran emplear Internet: sobre 744 respuestas, 433 votos en contra (58,1%), 285 a favor (38,1%), 26 en blanco (hubo 81 presenciales, entre ellos el del expresidente Urrutia, que ha querido dejar patente su afán revanchista y mal perder metiendo la papeleta sin escuchar ni el discurso de su sucesor), sin nulos. Las cuentas del ejercicio 2019-20 han salido adelante en un abanico de 743 papeletas, con 422 favorables (56.7%), 303 en contra (40%), 17 en blanco, un nulo y 28 abstenciones. Y las de este curso avanzan de forma más ajustada, gracias a 395 votos (53%), frente a 327 (44%), con 19 en blanco y 30 abstenciones, todo ello sobre 741 votos.  

La masa salarial ha subido de 75,8 a 80,4 millones pese a los recortes, por efecto de la destitución de Garitano, el fichaje de Marcelino y su equipo, las primas de la Supercopa y las renovaciones. El presupuesto pasa, con la corrección de estos dos meses entre una Asamblea y otra, de 134,9 millones e gastos y un déficit de 14,4 a proponer 138 y 21,4. La junta pasa de pedir a cada socio un 305 de las cuotas de 2021 a que no hagan frente a ninguna cantidad. La campaña pasada se cerró con 20,8 millones de pérdidas. 

Esta segunda Asamblea no hace más que dejar patente la fractura que sigue existiendo en el Athletic, donde sigue habiendo socios que defienden el 'no por el no', e incluso castas que tratan de imponer su gobierno en la entidad, siempre con el mal hacer de un Urrutia que no acaba de admitir su fracaso. Frente a ello, un Elizegi cuyo comportamiento muchas veces es tibio y que, sin capacidad de reacción, tarda una eternidad en poner a la entidad a cobijo ante las tempestades. Sus tachones y rectificaciones de rumbo son ya una parte destacada en la historia reciente del club bilbaíno. "Agradezco el tiempo en un domingo especial. Hay que preparar el escenario y el partido de la noche. Tomamos nota del trabajo, apreciaciones, detalles y cada critica constructiva que acabamos de vivir y escuchar, guardamos muchas de ellas con la firme intención de apuntarlas, porque muchas nos van a ayudar a seguir adelante en este 2021. El propósito es firme porque nos ayudarán las sugerencias que se nos han hecho. Nuestro vicepresidente Mikel Martínez ha hecho una defensa brillante de nuestro trabajo y nuestro contador, Jon Ander de las Fuentes, ha defendido unas cuentas que nos van a ayudar a seguir adelante en este 2021 y a hacer más Athletic", ha puesto como colofón Elizegi. La cita se ha desarrollado por espacio de más de cinco horas.