Un año sin el jeque Abdullah Al Thani
Se cumple un año desde que Abdullah Al Thani fue apartado de sus funciones como presidente por orden judicial. El Málaga se salvó de la desaparición.
Parece que fue ayer. Hace hoy un año María Ángeles Ortiz, titular del Juzgado de Instrucción Número 14 de Málaga, cesó de sus funciones al Consejo de Administración del club formado por Abdullah Al Thani (presidente) y a los consejeros Nasser, Nayef y Rakkan, hijos del anterior. También nombró como administrador judicial al abogado y economista José María Muñoz por un periodo de seis meses que se prolongará, al menos, hasta agosto.
Este proceso culminó tras una denuncia presentada por la Asociación de Pequeños Accionistas (APA) contra Al Thani y sus hijos por “administración desleal, apropiación indebida e imposición de acuerdos societarios abusivos”. Se solicitaba la adopción de medidas cautelares “ante la gravedad de los hechos constatados y con la finalidad de evitar el riesgo de que el delito siga cometiéndose”. La APA advirtió de que el club corría serio riesgo de desaparición. La querella siguió adelante y fue respaldada por el Ayuntamiento. La jueza pidió información al club, a LaLiga y Policia Nacional para completar la instrucción. Se hicieron registros en las oficinas de La Rosaleda para recabar documentación.
Como es conocido el club había entrado en una deriva de autodestrucción por la deficiente gestión de los Al Thani. Mientras el equipo, con 17 fichas profesionales, sancionado por LaLiga y con el límite salarial sobrepasado peleaba por no descender, el jeque y sus hijos tenían a la entidad como un banco personal para ‘sus gastillos’. Coches de alta gama, hotelazos de las mil y una estrellas, viajes, viviendas de lujo, hipódromo, te… vida disipada mientras el club se desangraba. La jueza también solicitó a los Al Thani una fianza de 5.443.556,24 euros por estos préstamos autoconcedidos, cantidad que ha aumentado a 8,5 millones de euros.
Respiro para la afición
Generalmente, una administración judicial es una mala noticia porque es síntoma de que una empresa está a punto de quebrar y en peligro de disolución. Así estaba el Málaga que, para añadir más sal a la herida, estaba en todos los informativos a nivel nacional por la difusión de un vídeo íntimo de su entrenador, Víctor Sánchez del Amo, que fue cesado de manera fulminante por el entonces director general, Richard Shaheen. La primera decisión de Muñoz fue despedir a este ejecutivo estadounidense al que le gustaba el jamón, hacer footing en La Rosaleda y que le sacaran a pasear a su pintoresco perro de aguas.
Salvar a un club moribundo
Tras el cese de los Al Thani se emprendió una doble batalla. Por una parte el administrador judicial tenía como misión única salvar a un Málaga destrozado por Al Thani. Por otra estaba la complicada batalla judicial. Al Tnaní presentó todo tipo de recursos para recuperar su mando en plaza mientras seguía queriendo mangonear a su antojo como si fuera el presidente (llegó a anunciar que Okazaki volvería al Málaga con el éxito por todos conocido. Sigue en el Huesca). No ganó ni un pleito. Eso sí. Mantiene sus estupideces místicas y levitantes en las redes sociales donde cada día tiene menos aduladores. Lo último que hizo para llamar la atención fue subir una foto anunciando que se había vacunado contra el Covid…
Medidas duras
Las decisiones tomadas por el administrador judicial han sido dolorosas. Aplicó un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectó a 40 trabajadores y ocho futbolistas y tuvo que pactar con LaLiga un límite salarial de 3’6 millones de euros, el más bajo del fútbol profesional. El traspaso de Antoñín al Granada, por 1,5 millones de euros, libró al club de ser otro caso Reus.
La administración judicial se volverá a prolongar en principio seis meses más. Al menos hasta agosto. Dos peritos están tasando los coches de lujo y las acciones de los Al Thani de cara a una posible posterior subasta por si entrase alguien interesado en el club. No es un camino sencillo. Queda mucho por hacer. Lo importante es que el Málaga, hace justamente un año, se quitó de encima a uno de los presidentes más dañinos de toda su historia.