De Sarrià a Cornellà, 32 años después
El Sabadell volverá a jugar en casa del Espanyol por primera vez desde 1989
Este viernes el Sabadell de Antonio Hidalgo saltará al césped de Cornellà-el Prat con la idea clara de prolongar su racha de imbatibilidad (suma ya nueve partidos) y lo hará 32 años después de la última vez que se enfrentó como visitante al Espanyol. Fue el 21 de octubre de 1989 y, evidentemente, aquel partido se jugó en Sarrià. La victoria fue blanquiazul (3-0) con goles de Gabino y Gay. N'Kono defendía la meta perica.
Pese a la distancia en el tiempo (32 años) los duelos entre Espanyol y Sabadell no eran extraños en el pasado. En total ambos se han enfrentado en 35 ocasiones en partido oficial, pese a que ahora hacía varios años que no coincidían. ¿La clave? Que desde el 89-90 no se han encontrado en la misma categoría. Mientras el Espanyol ha disputado los últimos años de forma ininterrumpida en Primera División, el Sabadell ha transitado entre Segunda y Segunda B. Hasta este año.
La gran mayoría de partidos entre ambos conjuntos, de hecho, se han disputado en Primera División. De los 35 choques, 26 han sido en la máxima categoría, 5 en la de plata y 4 duelos coperos. Arrancaron en los años 40, pero el descenso del club arlequinado privó a los aficionados de volver a ver un Sabadell-Español (en aquella época este era el nombre oficial del club) hasta 1962. A partir de ahí arrancó otra época del Sabadell en Primera, entre el 62 y el 72, que volvió a enfrentar ambos clubes. Lo mismo pasó en los últimos años de la década de los 80, con ambos equipos en Primera. Los tres últimos duelos, sin embargo, han sido en Segunda: los dos de la 89-90 y el partido jugado en la Nova Creu Alta en la primera vuelta de este curso.
El balance global de los Espanyol-Sabadell es ampliamente favorable a los pericos, que han ganado 12 de los 17 duelos directos, han empatado dos y han perdido tres. La última victoria arlequinada en el feudo perico, de hecho, se remonta a 1947. Una buena muestra de la dificultad de ganar este partido, que este año no será diferente: tras la victoria del Espanyol en Mallorca, los blanquiazules llegan en un buen momento al encuentro.