El líder se topa con Aspas
Aspas será la principal amenaza para un Atlético mermado por bajas que tiene. El Celta es una prueba de fuego para el conjunto madrileño. Luis Suárez quiere seguir con su racha.
Llega el Celta al Wanda Metropolitano y con él un jugador que a quien esto escribe produce admiración: Iago Aspas, un futbolista mayúsculo, referente de nuestra Liga y seña de identidad del histórico club gallego. Aspas será la principal amenaza para un líder que semana a semana se va sobreponiendo a las dificultades (sigue el partido en directo en AS.com). Sobre el terreno de juego no afloja, pero fuera de él es noticia un día sí y otro también, esta vez por los casos de coronavirus. Trippier seguirá sin estar por su sanción y a esa ausencia se unen las de João Félix, Hermoso y Dembélé. Carrasco se entrenó en solitario en la previa del partido, pero es complicado que pueda salir de inicio. El partido es una nueva prueba de fuego para un líder que no cede. Ante el Cádiz tuvo el partido tan ganado que se relajó y luego sufrió como pocas veces lo ha hecho durante la temporada.
Si entonces fue Negredo, ahora será Aspas quien quiera amargarle la noche al equipo de Simeone. En la ida se las hizo pasar canutas a Trippier, aunque la gasolina al punta y al Celta sólo le duró un tiempo. Los del Cholo seguirán con su sistema de dos carrileros (ahora Marcos Llorente y Saúl), tres centrales, tres en el medio y dos puntas. Puede aparecer Kondogbia, hasta ahora falto de minutos, con lo que Koke pasará a jugar por la derecha. A Lemar nadie le tose ya. Como tampoco a Luis Suárez, el gran protagonista de la primera vuelta liguera. A su lado, Correa, quien parece que no está pero siempre aparece.
El Celta podrá poner en el Wanda Metropolitano un once de garantías. El conjunto vigués tiene jugadores importantes, los Denis, Nolito, Mina, Hugo Mallo... Futbolistas experimentados y a los que ya no les pesa enfrentarse a cualquier equipo. Jugadores que en un partido pueden hacer mucho daño, aunque al conjunto gallego le esté costando alcanzar la regularidad que necesita para estar en la zona alta de la tabla. Con 25 puntos figura en tierra de nadie. Siendo optimistas sigue teniendo a tiro los puestos europeos. Si los vigueses prefieren ser cautos, y no lanzar las campanas al vuelo, saben que como se descuiden pueden meterse en problemas serios.
Fuera de casa ha jugado once partidos y únicamente ganó uno, al Athletic. Perdió cuatro y empató seis. Quizás se fueran satisfechos esta noche con un puntito, tal y como sucedió la temporada pasada, donde el Atlético dispuso de una veintena de ocasiones pero no fue capaz de hacer ningún tanto. Pero eso es historia.
Ahora el equipo rojiblanco tiene al pistolero del campeonato. Luis Suárez no perdonará tanto como hicieron entonces los futbolistas del Atlético. Esa es una de las grandes diferencias entre el equipo rojiblanco de la pasada campaña y el actual. El de ahora no perdona.