Los incendios de Zidane
Muchos frentes abiertos para el técnico, que será baja por COVID ante el Alavés: la gestión de los jóvenes, las renovaciones, el nuevo rol de Mariano...
Zidane, que será baja por COVID contra el Alavés, está viviendo una de sus temporadas más complicadas en el Real Madrid. El técnico siempre ha sabido salir de las crisis que ha tenido a lo largo de sus dos etapas en el banquillo blanco, aunque pocas veces se ha visto en una situación tan delicada como la actual.
Gestión de los jóvenes
En este punto aparece la mayor fractura ahora mismo entre el club y el entrenador. Cada vez son más las voces dentro de la entidad que cuestionan la gestión de los jóvenes que hace el francés. El de Odegaard es sólo el último ejemplo de una larga lista en la que aparecen, entre otros, Reguilón, Ceballos, Jovic o Brahim. Todos ellos futbolistas que el club considera estratégicos pero que se han visto obligados a hacer las maletas porque Zizou no contaba con ellos. Aparte de los que han salido, en la plantilla hay otros como Vinicius, Militao o Rodrygo que también han pasado por periodos en los que su sitio habitual ha sido el banquillo. Eso provoca una pérdida de confianza de jugadores que necesitan crecer con minutos, a la vez que Zidane insiste en la vieja guardia: Marcelo, Lucas Vázquez, Isco… Algunos piensan que el club va en una dirección y el entrenador en otra.
Renovaciones
Se puede enlazar con el punto anterior, porque Zidane insiste públicamente en presionar al club para que renueve a Modric, Sergio Ramos y Lucas Vázquez, los tres futbolistas que terminan contrato a final de temporada. Con el croata el acuerdo está apalabrado, mientras que con el capitán se espera una larga negociación porque el Madrid sólo está dispuesto a ofrecerle un año. En el caso de Lucas Vázquez, en el club no entienden la insistencia pública de Zizou para que siga. Su rendimiento y profesionalidad durante estos años han sido intachables, pero consideran que a sus 29 años está tapando el sitio a jugadores como Rodrygo, Vinicius o Brahim, que son los que deben dar un salto de calidad al Madrid en el futuro.
Valverde y Vinicius
Dentro de la falta de confianza en los jóvenes, estos dos casos preocupan especialmente en el club. Hay otros jugadores como Odriozola, Militao o Jovic que no aprovecharon sus oportunidades. Sin embargo, tanto Valverde como Vinicius han dejado grandes actuaciones recientemente. Por eso, no se entiende que Zidane no insista con ellos para dar minutos a veteranos como Isco o Lucas Vázquez, que están cerca de finalizar su etapa en el Madrid. Ahora el uruguayo se ha vuelto a lesionar, pero esta temporada no ha tenido el protagonismo de la anterior. El brasileño, por su parte, ha perdido confianza en su juego desde que Zidane le ha condenado al banquillo, después de ser decisivo en varios partidos esta temporada.
Mariano
Zidane tiene una papeleta con Mariano. Desde que regresó al banquillo blanco hace ahora casi dos años, le comunicó al club que no contaba con él. Por eso, se le ha buscado una salida en cada mercado, pero el delantero se ha negado a salir porque creía que antes o después iba a llegar su oportunidad. Al final, el tiempo le ha dado la razón. Empezó la temporada como cuarto delantero (por detrás de Benzema, Mayoral y Jovic). Primero fue el de Parla quien se marchó a la Roma al no encontrar una cesión para Jovic en verano. Ahora, en invierno, el serbio ha vuelto al Eintracht. Mariano ha pasado de no tener sitio ni en las convocatorias a primer relevo de Benzema. El canterano sabe que Zidane no cuenta con él, pero el francés deberá ser justo con Mariano y darle las oportunidades que merezca porque ahora mismo no le queda otra opción después de dar luz verde a la salida de Jovic.
Isco
El malagueño pidió salir en invierno pero el Madrid no se lo permitió. Todo hace indicar que, con contrato hasta 2022, su etapa de blanco terminará en verano. Pero antes Zidane necesita enchufarle para el tramo final de esta campaña, más aún si Odegaard termina saliendo. El centro del campo es la zona donde menos efectivos tiene y debe contar con el malagueño en partidos importantes, a pesar de que sepa que son probablemente sus últimos meses en el club.
Su tridente
En su regreso al banquillo, Zizou dibujó en su cabeza un tridente ofensivo que permitiera no echar de menos a Cristiano: Hazard, Benzema y Asensio. Pronto se truncó esa idea, con la lesión de larga duración del balear. Después, han sido los problemas físicos del belga los que no lo han permitido. Ahora Asensio ha vuelto a su mejor nivel y el reto de Zidane es conseguir que Hazard por fin se parezca en el Madrid al jugador que era en el Chelsea. De que lo logre o no dependerán buena parte de las opciones del equipo para terminar la temporada con algún título…