Messi, otros 8 tiros al limbo

A Messi no se le pudieron poner demasiados peros en Huesca. Se quedó sin gasolina al final, pero durante la primera parte y el primer tercio de la segunda capitaneó al Barça en busca del gol. Como no lo encontraba, dio la asistencia número 300 de su carrera deportiva (260 con el Barça y 40 con Arentina). Sin embargo, es extraño ese desencuentro del crack de Rosario con el gol. Sobre todo, porque sí está disparando a puerta, donde antes era prácticamente infalible.

En Huesca, Messi lo intentó ocho veces. Cinco veces, sus intentos se marcharon lejos de la portería, otro fue bloqueado por un defensa y dos tuvieron respuesta sobresaliente en Álvaro. El primero, después de un lanzamiento de falta directa que, parecía, iba a romper la mala racha del seis veces Balón de Oro en los lanzamientos directos. Pero Álvaro voló donde parecía imposible y sacó el balón. Luego, Messi hizo una pared fabulosa con Pedri, su nuevo socio, en una jugada que pareció llevar el mismo camino que el día de Valladolid. Pero no fue así. Álvaro le volvió a frustrar.

Messi, por cierto, ejecutó su lanzamiento número 400 de falta directa en LaLiga según datos de míster Chip. Ha marcado 35 goles, lo que supone un 8,75% de efectividad. A la distancia, puede parecer un porcentaje bajo. Pero no lo es ni de lejos. Grandes lanzadores de LaLiga no alcanzaron ese porcentaje ni de lejos. Ronaldinho, por ejemplo, se marchó de España con 7,32%; Cristiano, con el 6,13%; y Roberto Carlos, con el 4,19%.

Es cierto, sin embargo, que Messi está más alejado del gol que otros años. De hecho, se hace extraño verlo quinto en la tabla de goleadores, por detrás de su íntimo Luis Suárez, Gerard Moreno o Aspas, que tienen nueve goles; o el mismo Benzema, con ocho. Contra el Athletic, otra revancha.