Algo pasa con Odegaard
Ha perdido la confianza de Zidane: no juega un minuto desde el 1 de diciembre. Ha visto los 90 minutos de los últimos partidos desde el banquillo.
Algo se ha roto entre Odegaard y Zidane en las últimas semanas. Desde que el noruego fue titular en la dura derrota contra el Shakhtar en Champions (1 de diciembre) no ha vuelto a disputar un solo minuto. En tres de los encuentros que hubo desde entonces (Mönchengladbach, Atlético y Athletic) fue baja por unas molestias musculares, pero en otros cuatro (Sevilla, Eibar, Granada y Elche) vio los 90 minutos desde el banquillo.
Odegaard fue una apuesta personal de Zidane para esta temporada. El plan inicial es que se quedara otro curso más cedido en la Real Sociedad, donde tan buen rendimiento dio. Sin embargo, el entrenador francés, ante la falta de fichajes, decidió que era estratégico reforzar el centro del campo con el centrocampista zurdo. Pronto demostró su confianza: titular en los dos primeros partidos de Liga (Real Sociedad y Betis) donde fue sustituido y dejó actuaciones discretas. Aquello se entendió como parte del proceso de adaptación.
Más tarde una inoportuna lesión en el parón de selecciones de octubre le cortó el ritmo. Lo que no cambió fue la apuesta de Zidane, que confió en él como titular en tres partidos decisivos: Villarreal, Inter y Shakhtar. En los tres se repitió el guion de los días de la Real y el Betis: partidos discretos y sustituido antes de tiempo (no ha completado los 90 minutos en ninguno de los cinco partidos en los que ha sido titular).
Aquella dolorosa derrota frente al Shakhtar (2-0) que puso contra las cuerdas al Madrid en Champions cambió el panorama de Odegaard, que fue suplente en Sevilla y no volvió a pisar el césped en los siguientes encuentros. “No está pasando nada”, dijo Zidane sobre él tras el partido contra el Elche, donde ni salió a calentar.
De momento, se mantiene la calma alrededor de Odegaard pero sí que comienza a existir cierta preocupación especialmente en el plano mental. El noruego se encontró con su mejor fútbol en San Sebastián y en el Madrid no quieren que pierda ese desparpajo que mostró allí. Tampoco lo quiere Zidane, que volverá a darle oportunidades poco a poco. El francés es consciente de que los problemas físicos han lastrado, y mucho, a Odegaard en estos primeros meses. Por eso ahora no quiere cargarle de responsabilidad hasta que no esté al 100% y sin ninguna molestia…