Casemiro pasa al ataque
El brasileño, tres goles en las últimas seis jornadas de Liga, se confirma como el referente de una línea medular que hace el 29% de los tantos del Real Madrid.
El Real Madrid vuela al ritmo que impone el comandante Casemiro, un bulldozer del mediocampo que de cuando en cuando se eleva para resolver los atascos de la ofensiva blanca. Lo hizo ante el Atlético y repitió contra el Granada, en ambos casos con el agravante de abrir la lata a favor del cuadro de Zidane. El miércoles en Valdebebas, el brasileño remachó con la testa, tras imponente salto, un centro preciso de Asensio. El espaldarazo a un partido intermitente del Madrid en general, también de Casemiro.
Con el balón estuvo aseado, con 51 pases buenos de 59; protagonizó diez pérdidas y seis recuperaciones, el segundo que más del Madrid, sólo por detrás de Ramos, el mejor recuperador blanco (9). Le vendrá bien el descanso asociado al parón navideño: ha jugado completos seis de los últimos siete duelos. Y en LaLiga de ha convertido en un elemento fundamental en el que Zidane apoya su juego de ataque, sobre todo en el balón parado. Así fue ante el Atlético, cuando abrió el marcador de fuerte cabezazo (beneficiado por esa atracción irresistible que produce Ramos en los defensas rojiblancos; son las secuelas de Lisboa). Y así fue ante el Granada. Casemiro suma tres goles en LaLiga, los tres en las últimas seis jornadas.
A esos tres tantos añade el que anotó en casa del Borussia en Champions League, gol fundamental para la posterior clasificación como primero de grupo del Real Madrid; sin él, una derrota en Alemania hubiese lanzado al equipo de Mönchengladbach, sin demasiado remedio a la vista. Son cuatro dianas en total para Casemiro, el líder de una medular que se está mostrando especialmente importante en esta primera parte del curso, cubriendo las carencias que el ataque no es capaz de resolver: entre todos los medios han marcado 11 goles de 38, el 29%.
Tras Casemiro, Modric y Valverde han anotado tres goles cada uno; Kroos completa la lista, con un tanto. Y faltan por aparecer los otros dos medios de la plantilla, Isco y Odegaard. El primero anda lejos de su mejor punto de forma y tiene la cabeza en una posible salida inminente; el segundo comenzó jugando, pero las lesiones le han frenado. Zidane tiene esperanzas de que el segundo tramo del curso sea enteramente suyo. Los delanteros blancos apenas suman 20 goles esta temporada, con Benzema a la cabeza (12); y Ramos ha sido el único defensa que ha visto puerta hasta el momento. Curiosamente, los goles en propia puerta tienen un peso especial en la cuenta blanca: lleva cuatro hasta el momento.