Zidane aprende la lección
Protegió a Casemiro, apercibido, en Kiev, y el Madrid cayó. Pese a que con un amarilla se perdía el derbi, en Sevilla sí le puso y los blancos ganaron.
El Real Madrid tirita casi cada encuentro desde septiembre, pero sin Casemiro es como si saliera en calzoncillos a la calle en pleno diciembre. Los de Zidane sólo han sabido apañárselas para ganar en uno (16,66%) de los seis partidos de esta temporada en los que no ha estado en el once el brasileño, que incluso lejos de su nivel más alto ha vuelto a demostrar en la última semana que es imprescindible.
Zidane, y ya es costumbre porque sigue sin haber un relevo natural para Casemiro en la plantilla, afrontó una decisión difícil el martes en Champions. Apercibido el pivote, el técnico se preocupó tanto de la visita del Monchengladbach este miércoles que descuidó lo que tenía delante, un Shakhtar que ya le había sorprendido en casa en la primera jornada de la fase de grupos. Tras el 2-0, en el club comprendieron pero no compartieron la elección del francés, que no repitió pocos días después.
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Y eso que, aunque en Liga, el escenario era muy similar. Si Casemiro veía una amarilla contra el Sevilla, se perdería el derbi del 12 de diciembre en Valdebebas. Zidane, en esta ocasión sí, miró al presente y puso a su seguro en el centro del campo, más necesario desde que el Madrid convive con el unocerismo. El paulista, cinco recuperaciones, una anticipación y una entrada con éxito en el 0-1 en Nervión, movió sus músculos frente a los de Lopetegui, que terminaron acosando a los blancos.
Sin ese poderío, lo cierto es que el Madrid se pierde. Ante la Real Sociedad, en la puesta de largo de este curso, empató (0-0) y Casemiro disputó 21 minutos; contra el Cádiz cayó (0-1) con 45 minutos del brasileño, que a causa del coronavirus ni participó en el 4-1 en Valencia y el 1-1 en Vila-real; y a ello hay que sumarle el chasco del reciente tropiezo con el Shakhtar. Sólo hay una excepción al mal fario madridista sin Casemiro: el 0-2 en Milán, con 32 minutos suyos, recién recuperado del virus, para afianzar el triunfo. Por eso, para las finales del miércoles y el sábado, el Monchengladbach en Champions y el Atleti en Liga, la experiencia aconseja ir con todo, y en ese todo, por supuesto, se incluye a Casemiro.