La Real pierde el gol y se le escapa el liderato

La Real Sociedad sufrió un dejavú en Vitoria. Le volvió a pasar lo mismo que contra el Rijeka, el AZ Alkmaar, el Villarreal, el Nápoles, el Valencia... Son unos cuantos partidos esta temporada en los que es superior a su rival, en los que domina el partido y genera infinidad de ocasiones... pero luego no marca y acaba sin ganar el partido, a pesar de merecerlo. Contra el Alavés vivió la misma situación y se une a esta lista de partido que no gana mereciendo ganar. El equipo realista empató en Mendizorroza a pesar de jugar media con un jugador más, embotellando al Alavés en su área casi todo el partido y con Pacheco, su portero, como héroe sin discusión al salvar hasta tres ocasiones clarísimas de gol de los realistas.

El problema de esta falta de acierto en los últimos partidos es que le ha condenado a no poder mantener su espectacular dinámica. Sin gol no puede mantener el liderato de Primera una jornada más, y ahora cae a la segunda posición con 25 puntos. Después de seis jornadas en lo más alto, cinco en solitario, la Real ya no es líder, y eso que suma la friolera de ocho partidos seguidos sin perder. Es una locura para un equipo como el realista. Porque no siempre va poder ganar. A pesar de que haga méritos para hacerlo. Y eso es quizá lo que le debe tranquilizar. Que en todos los partidos es mejor que su rival, y está mas cerca de ganar que de perder. Pero luego la línea entre la derrota y la victoria es tan fina que no siempre te va a salir cara. Esta vez volvió a salir canto, empate, que no es un resultado malo habiendo jugado fuera.

Lo que es curioso es que se hable de la falta de gol de esta Real, cuando es el equipo que más goles lleva del campeonato nacional de liga. No le falta gol a esta Real. No se puede decir eso, porque no es cierto. Lo que quizá haya perdido es el duende, la finura que tenía hace unas jornadas para resolver la situaciones de ataque, en el área contrario, con lucidez, marcando goles y logrando goleadas. Pero curiosamente llegaban teniendo menos oportunidades que en estos últimos partidos. La Real debe recuperar la eficacia ante el marco contrario. De eso se trata. Y si lo hace volverá a machacar a sus rivales. Es imposible dudarlo.

Porque en Vitoria volvió a hacer un futbol fantástico, monopolizando el balón y haciendo un monólogo en la segunda parte. El Alavés no tiró a la portería de Remiro en casi todo el partido, algo en la primera parte, nada en la segunda. Algo querrá decir eso, ¿no? Y eso con Imanol haciendo rotaciones, metiendo mucha gente joven y de la cantera en el equipo, que no se resiente y mantiene tanto su estilo como su nivel. En Vitoria jugó con una media de 23,2 años.

Este mismo partido contra el Alavés habiendo marcado dos goles tendría hoy lecturas totalmente diferentes a las que hace mucha gente. No, la Real no está atascada. Tampoco le falta gol. A la Real le falta eficacia. Su principal fallo es que no es capaz de aprovechar li mucho y bueno que genera. Es un fallo importante, tampoco nos engañemos. Pero no es preocupante. Al menos por ahora. Aunque, claro, sin gol es difícil que haya liderato. Pero no es importante. Jugando así llegarán los goles, y lo harán como hace unas jornadas, en grandes cantidades. Y entonces volverá a ser el líder de la Liga. Y nadie dudará. Estaría bien que eso empezara en Nápoles, que le debe una a la Real. Su injusta victoria en Anoeta, donde la Real le pasó por encima bien merece la vuelta a la tortilla en el Estadio Diego Armando Maradona. Empecemos por ahí.