La mejor defensa de la historia
Oblak sólo ha encajado dos goles en 10 jornadas, números que compiten con los mejores de la historia de la Liga. El equipo necesita trasladar esa solidez a la Champions.
El Atlético de Madrid es feliz en la Liga y ve cómo brillan sus futbolistas jornada a jornada: João Félix, Carrasco, Llorente, últimamente Lemar… El equipo hace goles y acumula triunfos, algunos con muy buen juego y otros solamente a ratos. Y mientras, la defensa, que siempre ha funcionado con Simeone, sigue siendo una roca. De hecho, una más sólida que nunca. No en el Atleti, sino en Primera. En la historia de la Liga nadie mejora el promedio rojiblanco: dos goles encajados en diez partidos.
Oblak se ha llevado cuatro de los cinco últimos trofeos Zamora y vuela a por el quinto. Las cifras son espectaculares, prácticamente imposibles de sostener durante la Liga. Sólo Jorge Molina, del Granada (con 5-0 en el marcador), y Budimir, de Osasuna (con 0-2) han obligado al esloveno a sacar el balón de dentro de la portería. Ocho equipos han sido incapaces de marcarle un gol. Mérito del guardameta y de sus defensas, pues ya casi no hacen falta ni los frecuentes milagros de Oblak. Con la proyección que lleva el Atleti, terminaría la Liga con 7,6 tantos recibidos. Es una cifra tan baja que, a estas alturas, aún por cumplirse un tercio del campeonato, sólo la Real Sociedad ha recibido menos (5).
Así pues, a Oblak le toca compararse con la historia. Liaño, del Deportivo, sólo había encajado dos goles en las diez primeras jornadas de la 1993-94. Aquel equipo de Arsenio llevaba 11 a favor, por los 21 que llevan ahora los del Cholo. Pero el ritmo defensivo del equipo gallego no fue nada malo y terminó la temporada (la del famoso penalti de Djukic) con sólo 18 tantos en contra. Un récord histórico que desde 2016 le toca compartir con… Oblak y el Atlético. El esloveno recibió ocho en la primera vuelta y diez en la segunda.
Oblak, tras los Molina, Abel...
Entre los equipos mejor armados de la historia de Primera a estas alturas aparecen más versiones del Atlético de Madrid. Por ejemplo, en la 1995-96, la del Doblete de Antic, los rojiblancos (Molina) habían encajado tres goles en la jornada 10. En la 1987-88, Abel llevaba el mismo ritmo. En los cuatro cursos en que Oblak fue Zamora (de 2016 a 2019 consecutivamente), en la jornada 10 había recibido 6, 6, 6 y 5 tantos, igual que la pasada campaña.
Los números en Liga son tremendos y por eso contrastan aún más con lo que ocurre en Champions. De las cinco jornadas, el equipo sólo dejó la puerta a cero en casa contra el Lokomotiv. El Bayern le ha metido cinco goles (4+1), el Salzburgo, dos en el Metropolitano, y los rusos, uno en Moscú. Y en la solidez está una de las claves que puede acercar al Atleti a los octavos: si el equipo se acerca al modo Liga y no encaja, se clasifica.