Un taxi gaditano de la Real
Balbino Batista luce con orgullo en su taxi 79 de Cádiz el escudo txuri-urdin. Su corazón es del Cádiz, su taxi de la Real.
Corazón del Cádiz. Taxi de la Real. Es Balbino Batista, un taxista gaditano que conduce un taxi por las calles de Cádiz con el escudo de la Real Sociedad pegado en su luna trasera y con un peluche (un patito) también vestido con los colores del equipo donostiarra. Es el taxi 79 de Cádiz. Es fácil de reconocer, y muchos gipuzkoanos que viajan hasta la localidad andaluza a veranear lo comprueban y se quedan sorprendidos. “Preguntan, claro. Se quedan sorprendidos. Y yo les explico que soy gaditano, del Cádiz y de la Real Sociedad”, explica Balbino. Una mezcla un poco extraña que tiene fácil explicación. “Soy de la Real de toda la vida, de forma natural, como otros son del Madrid, del Barça o del Sevilla. Yo soy de la Real, y punto”. ¿Pero de dónde viene esa afición en una persona nacida en Cádiz? “Yo soy de la época de los 80, de cuando la Real ganaba los títulos de liga y era un equipo campeón. Me llamó la atención, un equipo simpático y desde entonces le tengo mucho cariño, soy un aficionado txuri-urdin más”.
Pero esta afición de Balbino Batista por la Real Sociedad tiene un matiz importante. “A ver, a ver, que yo como buen gaditano, soy del Cádiz a muerte. Mi corazón es del Cádiz, y cuando juega el Cádiz en el Carranza, aparco el taxi y ese día solo está mi Cádiz. Pero luego está la Real Sociedad, que también es mi equipo y tengo mucho cariño. En el coche tengo el escudo de la Real, en mi llavero también llevo otro escudo de la Real, y tengo un patito con la equipación de la Real. Y cuando juega también intentó ver sus partidos, en el taxi con el móvil o voy a un bar. También es mi Real”. Pero el taxista cadista y txuri-urdin no tendrá el corazón dividido este domingo. “No, no. Primero mi Cádiz. Quiero que gane siempre. Y luego la Real. Pero si los dos necesitaran los puntos, querría que empataran, pero con muchos goles, para divertirnos un poco. Lo que pasa es que ahora, como los dos están bien, quiero que gane mi Cádiz y que la Real siga Primera. Estoy disfrutando mucho con este equipo de Imanol, y con tanta cantera que tiene de Zubieta. Es un orgullo. Mi apellido es Batista, casi como Bautista. ¡Soy casi de la cantera!”, exclama con la habitual simpatía gaditana.
Eso sí, Balbino Batista reconoce que ha tenido que explicar más de una vez su afición por la Real cuando ha entrado algún cliente a su taxi. “Muchos se extrañan que no siendo Vasco, sea de la Real y no del Athletic, que dicen que es el equipo más grande del País Vasco. A mí me molesta ese comentario, porque para mí el grande es la Real. Cuando era pequeño tenía entrenadores bilbaínos que me gastaban bromas también. Pero es que yo iba a entrenar con mi camiseta de la Real. Tengo dos hijos pequeños y los dos tienen su camiseta de la Real. Somos cadistas, pero también de la Real. Y me encanta que mi taxi lleve el escudo de la Real”, dice.
Balbino ya ha viajado varías veces a San Sebastián a ver a la Real, gracias a ese escudo de su taxi. “Carlos Benito (directivo y presidente de varios clubes donostiarras) se montó en mi taxi una vez que vino a Cádiz y se sorprendió por los detalles de la Real. Hablamos de mi historia, de lo cansado que estaba de que solo se hablara de Madrid y Barça, y que ser de la Real y del Cádiz era como algo diferente y bonito a la vez. Fue un trayecto corto pero hicimos amistad. Esa Navidad me mandó unas camisetas de la Real y me invitó a ir a Anoeta. Fui a ver el partido de Champions League contra el Manchester United. Allí paseé por Donosti vestido de la Real y con mi acento gaditano, y a la gente le sorprendía. Cómo Josu, el gerente de un restaurante de la parte vieja (El San Sebastián) con el también hice amistad. Y así ha ido creciendo mi pasión txuri-urdin”. Ahora Balbino luce orgulloso por Cádiz su taxi de la Real, el número 79, que aparcará para disfrutar este domingo, por fin, después de mucho tiempo de un Cádiz-Real de Primera división.