Último tren para Umtiti
Mientras espera a Eric García, Koeman cuenta con que el francés, al menos, pueda cubrir alguna baja eventual de Piqué o Lenglet. Y más mientras Araújo está lesionado. Ha estado 465 días de baja en Barcelona.
Samuel Umtiti lleva casi cinco meses sin jugar un partido oficial con el Barcelona. Fue el 27 de junio contra el Celta en Balaídos (2-2), el día de la tormenta entre Setién y Messi. Luego, el francés fue convocado ante el Atlético de Madrid, pero no jugó. En los días siguientes, Umtiti apareció en el vestuario del Barcelona y se borró para el resto de la temporada alegando unos dolores en la rodilla que no terminaron de convencer dentro del club. El detalle no gustó nada dentro del Barça. Y ya no ha vuelto a jugar.
Pero hubo más. En los días de la humillación de Lisboa, Umtiti fue declarado positivo en coronavirus. Y nada más empezar la pretemporada, volvió a recaer de sus problemas en la rodilla izquierda, esos que le han tenido ya de baja 285 días desde que juega en el Barcelona. Hasta que llegó al club azulgrana, Umtiti sólo había estado 17 días lesionado en su carrera deportiva. De azulgrana ha estado 468, más de un año y tres meses de los cuatro y poco que lleva en la Ciudad Condal.
El Barça intentó desprenderse de Umtiti este verano de todas las maneras posibles. Su nombre estuvo en la lista del PSG, pero fue descartado por sus problemas físicos. Luego apareció su casa, el Olympique de Lyon, pero tampoco se concretó nada. Umtiti se quedó en el vestuario, donde fue muy criticada su manera de quitarse de en medio la temporada pasada en una situación límite para el equipo. Empezó a trabajar y Koeman le abrió una puerta la pasada semana. “Si está físicamente en condiciones, contaré con él”, avisó el técnico holandés consciente de que lo necesita mínimamente enchufado porque la lista de centrales es corta.
Es el último tren de Umtiti, que a sus apenas 26 años no está en los planes de futuro del Barça, pese a que tiene contrato hasta 2023; y que necesita ponerse al menos en el escaparate para no terminar en la élite a una edad tan corta. Es difícil saber cómo está realmente el físico de Umtiti. Según la opinión de algunos expertos, su caso es irreversible, al menos para jugar con continuidad. Su renuncia a operarse, y los errores en la recuperación, dejaron en estado de debilidad los cartílagos de su rodilla izquierda. Es débil en esa zona y no aguanta el paso de los partidos.
En los últimos días ha empezado a trabajar con el grupo. Con Ronald Araújo lesionado desde Turín, y la duda de si el Barça podrá fichar en enero a Eric García, Koeman está obligado a tenerlo en cuenta porque no tiene nada más en la plantilla. Es algo así como una último tren para Umtiti. Desnudo de credibilidad como está, demostrar que todavía es útil para el Barça y que aún puede ser un defensa de élite es todo un desafío para él. Lleva varios años fracasando en el intento. Koeman le mira con lupa. También todo el barcelonismo, de quien un día fue ídolo.