"Rosell es el responsable del espionaje al que fui sometido"
La Audiencia Nacional ordena archivar provisionalmente la querella contra el expresidente del Barcelona. El presidente de Mediapro emitió una nota tras ello.
La Audiencia Nacional ha ordenado archivar provisionalmente la querella de Jaume Roures contra Sandro Rosell, expresidente del Barcelona, por espionaje. "La Audiencia concluye que no existen indicios suficientes que avalen la tesis del Sr. Roures y Mediapro, según la cual dicho espionaje fue inducido o instigado por Sandro Rosell, con la cobertura del FC Barcelona", han explicado en un comunicado los abogados del expresidente azulgrana. Mientras, la otra parte insiste en que es un archivo provisional y que la instrucción continúa.
La Audiencia Nacional ha archivado un caso que ya no se puede recurrir judicialmente. Además, la Audiencia Nacional ha desestimado el recurso de apelación de Roures por haber dejado fuera de la causa en su día al FC Barcelona. El litigio Rosell-Roures venía de 2016, cuando Roures se querelló contra Jaume Roures por "espionaje sistemático, deliberado y organizado". Roures acusaba a un trabajador de su empresa de entrar en el sistema informático de la compañía para robar centenares de correos electrónicos suyos y remitírselos a Rosell y Joan Carles Raventós.
Roures: "Rosell es el responsable del espionaje al que fui sometido"
El presidente del grupo Mediapro, Jaume Roures, sigue pensando que el expresidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, es "el responsable del espionaje" al que se considera que fue sometido "durante, al menos tres años", por lo que más allá de rectificar sus declaraciones al respecto, se reafirma en las mismas. Mediante un comunicado, Roures se refiere a la resolución de la Audiencia Provincial de Barcelona, que "en contra del criterio del juzgado de instrucción de nº 8 de Barcelona" ha acordado "el sobreseimiento provisional de las actuaciones respecto a Sandro Rosell en el marco de la investigación por el espionaje que sufrí durante más de tres años". "Si en algún momento aparecen nuevos indicios o hechos que determinen la vinculación de Sandro Rosell, podría reabrirse el procedimiento contra el Sr. Rosell", recuerda.
Roures considera que la propia Audiencia Provincial reconoce que los empleados de Sandro Rosell y el FC Barcelona, Robert Cama y Juan Carlos Raventós, le espiaron y "se hicieron con centenares (o miles) de mis emails personales y de trabajo, que compartieron con Sandro Rosell, al que la Audiencia Provincial considera mero receptor pasivo, a falta de más indicios sobre su participación en el apoderamiento y difusión de mis emails". Asegura el presidente de Mediapro que respeta, pero no comparte, el criterio de la Audiencia Provincial, pero reitera su convencimiento de que Sandro Rosell era "el instigador de las conductas que van a ser enjuiciadas". "Si no las instigó, ¿por qué no las denunció durante los más de tres años en los que según consta estuvieron recibiendo los correos robados por Robert Cama? ¿Y por qué razón Robert Cama fue posteriormente contratado por el FC Barcelona?", se pregunta.
Además recuerda que "la actitud del Sr. Rosell de eludir sus responsabilidades, descargándolas en subordinados no es nueva" y pone como ejemplo "su actuación en la investigación y condena por fraude fiscal en el fichaje de Neymar". "A pesar de ser Presidente del FC Barcelona, y por tanto, responsable de su gestión, eludió toda responsabilidad penal dejando que ésta recayera únicamente en el club", indica Roures. En el auto, la sección séptima de la Audiencia de Barcelona desestima el recurso de apelación interpuesto por el presidente de Mediapro, Jaume Roures, y estima la petición de la defensa de Rosell de que se acuerde el sobreseimiento provisional de las actuaciones en el caso.
Mediapro denunció a Rosell en 2016 por unos hechos producidos entre los años 2009 y 2011, al haber tenido acceso éste al correo electrónico de Jaume Roures, presidente del citado grupo de comunicación. La denuncia se ampliaba al expresponsable del departamento informático de Mediapro, Robert Cama; al entonces director general de secciones del FC Barcelona, Joan Carles Raventós, y al FC Barcelona y a las empresas Bonus Sport Marketing, de la que era propietario Rosell, y Socktel Servicios Informáticos.