El Coruxo juega, el Depor gana
Otro partido plano del Deportivo que se llevó el duelo en un latigazo de Lara y se sitúa en lo más alto de la tabla. El Coruxo, colista, sigue sin marcar.
El Deportivo no juega bien ni domina los encuentros, pero gana. Todo el mundo espera mucho más de este equipo, que mientras busca la fórmula para convencer va sumando por sus destellos individuales. Lo hizo ante Unionistas con un golazo de Héctor Hernández y lo hizo ante el Coruxo en la única aparición de Lara. Ni siquiera esta vez se puede decir que la solidez defensiva fuese excelente porque los vigueses tuvieron claras oportunidades, pero su falta de puntería les condena. Ni un gol han marcado los de Míchel en estas cuatro primeras jornadas, un defecto demasiado grande que los mantiene en la última posición del grupo a pesar de que su fútbol merece más premio. Todo lo contrario recogen los de Vázquez, que a pesar de su planicie se pondrán líderes en solitario esta tarde si Zamora y Pontevedra empatan en el Ruta de la Plata.
Las primeras sensaciones ya señalaron a un Coruxo sin complejos y con ganas de balón ante un Deportivo más vertical, pero muy impreciso, con los mismos problemas de circulación de balón de anteriores partidos y con desajustes en la presión. El paso de los minutos fue afianzando la apuesta de los de Míchel Alonso, que pasaron a dominar el partido. Eso sí, sin llegar a hacer sufrir a los coruñeses que sólo veían un pequeño rayo de luz, muy pequeñito, con los pases de un Bergantiños que actuaba de central por las bajas en defensa. Tan pocas eran las ideas, que cumplida la media hora el Depor ni había conseguido disparar una sola vez a la portería de un Alberto que vivía una plácida mañana en Riazor. Todo plano hasta una gran falta lateral de Keko el minuto 37 que solo el larguero evitó el premio del gol. El susto hizo que el Coruxo diese dos pasos hacia atrás y que los blanquiazules acabasen el primer tiempo acosando, pero sin golpear. Pobrísimo bagaje local, sin ideas por fuera y menos por dentro con Borges, Nacho, Lara y Beauvue desaparecidos. Buenas sensaciones visitantes, pero sin peligro real dejando claro el problema con el gol de los vigueses.
Y las primeras de cambio en el segundo tiempo, llegada nítida de Lara tras un gran pase de Bergantiños anulada por presunto fuera de juego. Muy presunto, lástima de VAR en este caso. La ocasión avisó de un partido distinto, con un Depor más volcado apoyado en la superioridad de Uche, que tuvo recompensa en el minuto 55. Circulación en el balcón del área, pase de Borges que deja pasar Beauvue y Lara, resuelve de forma individual con un disparo raso y cruzado. Gol y vuelta al guion original porque los blanquiazules, por muy favoritos que sean, viven más cómodos defendiendo que atacando. Y casi pagan en ese pecado en el minuto 60, en el que Antón de Vicente remató de cabeza solo una falta que no fue el empate por los reflejos de Carlos Abad.
Fernando Vázquez, en su último partido de confinamiento en la grada, tampoco lo veía nada claro y dio entrada de golpe a Gandoy, Borja Galán y Miku, que tardaron poco en crear una triple oportunidad tan clara como la que tuvo el visitante Jairo un minuto después demostrando que el Coruxo, lejos de rendirse, quería premio a su buen juego. Paso al frente de los vigueses, espacios para los coruñeses en busca de la sentencia. No llegó ni una cosa ni la otra en un tramo final que volvió a demostrar que Borja Galán y Gandoy merecen alguna oportunidad más dado el bajo nivel de varios de sus compañeros.