Muere Tonny Bruins, el hombre de la 'manita'

Tonny Bruins Slot (1947-2020), mítico ayudante del equipo técnico de Johan Cruyff en el Dream Team, ha fallecido a los 73 años después de una larga lucha contra el cáncer. Técnico de larga trayectoria que también fue colaborador de Ronald Koeman, su figura siempre estará asociada en Barcelona a la histórica manita que el Barça le hizo al Madrid en la temporada 1993-94 con hat-trick de Romario. Cuando Iván Iglesias hizo el quinto gol, Tonny Bruins levantó su mano abierta para compartir la euforia del banquillo con la afición del Camp Nou. La imagen, que dio la vuelta al mundo, resulta icónica en la historia de Can Barça y fue evocada por Gerard Piqué, más o menos a la misma altura del campo, cuando el Barça le hizo otros cinco al Madrid de Mourinho en la temporada 2010-11.

Tonny Bruins llegó a Barcelona por expreso deseo de Johan Cruyff, con quien había trabajado en el Ajax. Como la reglamentación de entonces sólo permitía que hubiese dos técnicos en el campo, y pese a que su labor principal era hacer informes técnicos de los rivales, Bruins estaba inscrito como auxiliar de material, de ahí su posición en el campo el día del famoso 5-0. Eso sí, Tonny Bruins sí tenía carnet internacional de entrenador. De hecho, fue uno de los motivos esgrimidos por el Barça para ficharlo por si Cruyff que tenía menos trayectoria en los banquillos, encontraba algún obstáculo por el camino. A Tonny Bruins, que también fue colaborador de Ronald Koeman en el Ajax entre 2001 y 2005, se le reconoce el descubrimiento de espectaculares talentos como Kluivert, los De Boer, Seedorf, Davids o Reiziger. En el Ajax está considerado una figura imprescindible en la detección de futuras estrellas.

Se hizo querer por su gran talante, aunque discusiones con las vacas sagradas del Dream Team nunca faltaron. Y todo, porque hacía de árbitro en los partidillos... Rijkaard quiso recuperarlo para el Barça cuando Laporta fichó a Frank en 2003, pero entonces Bruins trabajaba en el Ajax con Koeman, de quien fue ayudante en los ajacied, pero también en Benfica, PSV y Valencia.

La noche del 5-0, el hijo de Tonny Bruins, Antoine, estaba en el Camp Nou. Hizo de recogepelotas en el partido. Se llevó la camiseta de Guardiola, que un día colgó de la puerta de su despacho. Fue el botín final a una noche histórica de la que Bruins, casi más que Romario, se convirtió en la imagen. Barcelona le quiso mucho. Se va Tonny Bruins, pero su mano es eterna.