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ELCHE-VALENCIA

Carles Gil: "En el Elche fui feliz; en Valencia me pesó la presión”

Carles Gil vivirá desde Boston el derbi entre el Elche y el Valencia, los dos clubes que le catapultaron a la elite; espera un duelo igualado pese a la diferencia de presupuestos.

Carles Gil, en una foto de archivo de su etapa en el Deportivo.
JESUS SANCHO RODRIGUEZDIARIO AS

Carles Gil (Valencia, 1992) es una estrella en la MLS. Fue elegido fichaje del año 2019 y ahora es el capitán del New England Revolution, club donde es el fichaje más caro de su historia (1,5 millones de euros). Acaba de salir de una lesión y este miércoles volverá a entrenarse con su equipo, listo para regresar a la competición este viernes. Ese mismo día se vivirá un bonito derbi en su tierra, entre Elche y Valencia. Lo seguirá con añoranza a seis mil kilómetros de distancia y con el deseo de que gane el mejor.

Han pasado ocho años desde su estreno como profesional en el Elche y cinco desde que se marchó del Valencia. ¿Qué queda de aquel joven que ahora es estrella en la MLS?

Mucho. Sigo siendo el mismo, con más experiencia y madurez. En el Elche di mis primeros pasos como futbolista de elite; fue una etapa increíble, como reconozco cada vez que me preguntan. En el Valencia me presioné demasiado y no terminé de demostrar todo lo que llevaba dentro.

¿Dónde se vio al mejor Carles Gil?

En cuanto a rendimiento, quizá fui más regular en el Elche a pesar de que sufrí muchas lesiones. Era muy joven. En realidad, fue el sitio donde menos nivel futbolístico tenía, con muchas cosas aún por aprender, aunque donde más cómodo me encontré. En el Aston Villa empecé bien los primeros meses, pero hubo cambios en la dirección y, a partir de ahí, me costó volver a brillar.

¿Y en el Valencia?

Me encontré con una gran plantilla, con estrellas como Negredo, Rodri, Alcácer, André Gomes, Piatti, Feghouli... Me costó adaptarme a la presión de querer triunfar en el club de mi vida. Venía de estar mal acostumbrado en el Elche, donde todo rodó a la perfección en lo individual y en lo colectivo, con mucha confianza del club y de Fran (Escribá). Me agobié y cuando me llegó la oferta del Aston Villa, la acepté. Sufría problemas para dormir, para descansar en la siesta. Igual mi sensación no se correspondía a la realidad, porque todo era normal y me sentía querido, pero mentalmente me sentía así y eso me afectó.

¿Se precipitó marchándose al Aston Villa?

No lo veo así. Fue una decisión que tomé con mis anteriores agentes. El Valencia no quería que me fuera y se remitía a la cláusula o nada. Yo quería salir porque no conseguía ser feliz. Aspiraba a demostrarlo todo en cada minuto y eso me pesó. En el Elche, sin embargo, era realmente yo.

¿Cómo recuerda el ascenso de aquel Elche y su estreno en Primera?

Llegué súper ilusionado y me adapté enseguida. Fue mi primera experiencia fuera de Valencia. Di el salto de Segunda B a Primera en dos años. Gente como Rivera, Generelo, Albacar, Pelegrín, Mantecón... me lo pusieron muy fácil. Mi gran amigo de aquella etapa es Palanca, éramos inseperables; Paco Montoya, que sigue de delegado, me trataba como a un hijo. Y encima estaba a hora y media de casa. ¡Qué más podía pedir!

¿Cuándo regresará a España?

Lo primero que tengo que decir es que estoy muy a gusto en Boston. El míster, el club y los compañeros me tratan fenomenal. Siento el corazón dividido ante esta pregunta. Por un lado, he vuelto a ser feliz jugando al fútbol, pero por otro sé que tarde o temprano volveré a Europa. No sé si tardaré seis meses o seis años. No es bueno pensar a largo plazo. Igual que dije en su día que no entraba en mis planes venir a Estados Unidos y aquí estoy, no sé qué pasará en el futuro.

Estados Unidos vive con crudeza la pandemia. ¿Cómo es allí el día a día?

Aquí hay menos restricciones. La población nunca se llegó a confinar. Es verdad que los negocios cerraron y cuando salías, no había gente por la calle. Es un país gigante y también depende del estado. En Boston, por suerte, están bien las cosas.

¿Le paran por la calle en Boston?

No. La cultura es diferente. Aunque alguien te reconozca, no te para. Cada uno mira hacia el frente y va a lo suyo. En España somos más de mirar al de al lado.

Desde la distancia, ¿qué espera del derbi entre Elche y Valencia?

Será un duelo igualado, más de lo que piensa la afición. El Elche, con un punto más de moral. Sorprende lo bien que se ha adaptado a la categoría, a pesar del poco tiempo que ha tenido de pretemporada y los problemas para confeccionar su plantilla. El Valencia, por su parte, no está al nivel que se le supone por historia y entidad debido a muchas circunstancias.

¿De qué club guarda mejores recuerdos?

De los dos. Nunca olvidaré el ascenso del Elche y el gol que marqué en el derbi ante el Hércules, en la segunda jornada de Liga. Mis amigos estaban en la grada alta del Rico Pérez, allá arriba, y fue brutal. Del Valencia, recuerdo mi debut en Mestalla y el tanto que marqué en Anoeta. Fue un objetivo cumplido.

¿Con qué sueña ahora?

Con seguir disfrutando del fútbol y mejorando como persona y profesional. Siempre hay margen para progresar.

¿Y con volver?

Algún día. Ni Elche ni Valencia me han vuelto a llamar, que yo sepa, aunque el contacto siempre lo he mantenido. Mi hermano Nacho estuvo hasta hace poco en Elche. Deseo de corazón que el Valencia solucione sus problemas y vuelva a ser tan grande como siempre. Y que el Elche continúe como hasta ahora porque es un club al que mantengo en mi corazón.

¿Su pronóstico?

Que gane el mejor.