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El caso Fuenla causó perjuicio de 3 M€ en A Coruña, según la Cámara de Comercio

La Cámara de Comercio de A Coruña estima que los sectores de la hostelería, el comercio, el turismo y los servicios son los que se han visto principalmente afectados.

CabalarEFE

El viaje del equipo de fútbol Fuenlabrada a A Coruña el pasado 20 de julio con un brote de COVID-19 ha supuesto un perjuicio económico de tres millones de euros para la ciudad gallega, según cálculos de la Cámara de Comercio coruñesa.

Esta entidad ha elaborado un informe que refleja las graves consecuencias económicas que se derivaron de ese desplazamiento del equipo fuenlabreño para disputar en el Estadio de Riazor la última jornada de LaLiga SmartBank, que tuvo que ser aplazado.

Los jugadores y cuerpo técnico del Fuenlabrada estuvieron confinados en el hotel de concentración en A Coruña por un brote que afectó a casi 30 miembros del equipo, la mayor parte de los cuales formaba parte de la expedición que viajó a la ciudad gallega.

La Cámara de Comercio de A Coruña estima que los sectores de la hostelería, el comercio, el turismo y los servicios son los que se han visto principalmente afectados y han tenido un perjuicio de más de tres millones de euros.

Los datos analizados señalan una caída de las pernoctaciones en el mes de agosto en términos interanuales superior al resto de localidades turísticas gallegas, mientras que en julio los datos de A Coruña eran similares a las de otras ciudades de la Comunidad Autónoma.

El diferencial de agosto se explica, según la Cámara de Comercio, por el efecto negativo provocado por la situación sanitaria y mediática generada por la crisis sanitaria derivada de los casos positivos COVID de jugadores y personal del Fuenlabrada SAD hospedados en la ciudad.

Además del perjuicio económico, generó también otro deportivo, ya que el Deportivo de La Coruña no pudo disputar el partido con el Fuenlabrada el 20 de julio en horario unificado con el resto de los de su categoría a pesar de que así estaba previsto en una circular de la Federación Española.

El caso está en los juzgados en una doble vertiente, ya que por un lado se investiga si el Fuenlabrada, LaLiga o sus respectivos presidentes han cometido algún delito al viajar con positivos de COVID-19, mientras que por la parte deportiva el club gallego, que descendió a Segunda B, ha reclamado su derecho a seguir en el fútbol profesional.