Viana: “Estoy hundido en casa, discuto con mis padres”
El ex albinegro, que rescindió a falta de tres días para el cierre de mercado, se encuentra sin equipo.
Manu Viana ha pasado de la alegría a la tristeza en poco más de dos meses y medio. El pasado 19 de julio lograba el ascenso a Segunda División con el FC Cartagena y a primeros de octubre rescindía contrato con la entidad albinegra, aunque desde el arranque de la pretemporada sabía que era uno de los jugadores que no entraban en los planes de la comisión deportiva. El valenciano apuró hasta el final para desvincularse y durante este tiempo “he rechazado ofertas de equipos humildes” de Segunda B “pensando que podría ser posible encontrar algo mejor” tras una temporada en la que “tuve algunas lesiones que no me hicieron disfrutar todo lo que hubiera querido de lo que más me gusta: el fútbol”.
Ahora el ex de Villarreal B y Atlético Levante no encuentra equipo y eso hace mella en su ánimo personal. En una carta publicada en sus redes sociales dice estar “hundido en casa” y que no sabe “qué hacer, discuto con mis padres… y casi no duermo por las noches”. Para Viana, “el hecho de haber estado en filiales me hizo no ver nunca la realidad del fútbol. Y en este deporte, que es mi trabajo, como en la vida, se toman las decisiones que, más allá de ser buenas o malas, son decisiones de las que siempre se aprende algo”.
Para Viana, que participó en 11 partidos y que con la llegada de Borja Jiménez ganó protagonismo en el once, “lo único que me hace pensar en positivo ahora mismo es lo que me va a pasar, algo que ya sé. Saldré más fuerte, valoraré más lo que tengo, disfrutaré de cada momento que pase con mis compañeros, no seré tan duro conmigo y ojalá muchas más cosas que me servirán de lección”. Acaba diciendo que escribe dicha carta “para cuando tenga un mal día me pueda apoyar en estas palabras y me dé cuenta de todo lo que había tenido y no supe valorar. Entendedme, necesitaba contároslo”.