1x1 del Celta: Partido horroroso de un equipo que entra en crisis
Aspas fue el único que salvó su orgullo personal, el resto de jugadores rindió a un pésimo nivel. Debut de Miguel Rodríguez en Primera División.
Iván Villar: Poco o nada pudo hacer en los goles de Osasuna. Realizó un buen despeje a disparo de Calleri al inicio de la segunda parte.
Mallo: Entró en la historia olívica al disputar su partido número 236 en Primera y convertirse en el jugador celeste con más encuentros en la máxima categoría, superando a Mostovoi. En lo futbolístico, no estuvo nada acertado en sus internadas, con centros imprecisos y pases erróneos.
Aidoo: No hay manera que complete un partido sin una pifia. Esta vez tardó poco en crear alarma en su propia área, aunque tuvo la suerte de que no había jugadores rivales por allí cerca. Sufrió mucho con Gallego y Calleri, no dio sensación de seguridad en ningún momento.
Murillo: No es el mismo de hace unos meses. Calleri le ganó la batalla en todo momento, marcó un gol y pudo anotar otro en una jugada en que dejó las vergüenzas del colombiano al desnudo. Desastroso en la salida de balón.
Olaza: Su rendimiento empieza a ser preocupante. Es un coladero en defensa y no aporta nada en ataque. Aspas le regaló un balón de oro dentro del área y lo tiró a la basura. Los centros envenenados han desaparecido de su historial.
Tapia: Tiene que barrer tantos metros que empieza a excederse en esa función. Vio su tercera amarilla del curso y acabó siendo sustituido ante el riesgo de una posible expulsión. No tiene criterio ni calidad suficiente como para encargarse de la circulación del balón.
| Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
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| Próximos partidos |
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Okay: Totalmente desaparecido. No hubo noticias del turco durante todo el partido. No sumó en defensa ni se le vio en ataque. No ganó un duelo por alto ni colaboró en la circulación. Fue un cero a la izquierda. Sorprende que disputar los noventa minutos.
Baeza: Puso empeño, pero le faltó acierto. Se llevó dos golpes contra la valla y continuó yendo al choque sin arrugarse. Realizó un disparo a la grada en la primera parte. Nunca consiguió conectar con los hombres de arriba.
Denis: Estuvo mucho mejor en la recta final del encuentro, cuando actuó por dentro y llevó la manija del equipo. Tirado a la derecha le costó mucho entrar en juego y desbordar. Eso sí, cumplió en las ayudas defensivas que le correspondían.
Aspas: Es el único argumento que tiene el Celta. El moañés lo intentó de todas las formas, pero nadie le acompañó en su misión. Tenía que hacer de enganche y de ariete, ejercer de asistente y de rematador. Rozó el gol en una de sus características jugadas imposibles.
Nolito: Muy desafortunado en el remate y en el último pase. No tuvo su día más inspirado. Falló remates y entregas fáciles. Tuvo la más clara al inicio del segundo acto, tras un gran pase de Aspas, pero disparó suave a las manos de Herrera. Debió ayudar más a Olaza en defensa.
Emre Mor (entró por Baeza): Su protagonismo se diluye cada semana como el efecto gaseosa. Ya ha pasado de titular a suplente. Aún así, Óscar le concedió media hora en la que no aportó absolutamente nada. Su teórica calidad diferencial continúa sin aparecer.
Mina (entró por Tapia): Al poco de entrar al campo, el Celta recibió el segundo tanto y el duelo quedó prácticamente finiquitado. No entró mucho en juego durante el tiempo que estuvo sobre el césped.
Miguel (entró por Nolito): Debutó en Primera a sus 17 años y tardó un minuto y medio en demostrar que tiene garra. Vio la amarilla en una primera acción en la que pugnó por el balón y cometió falta. Puso ganas y se ofreció en el poco tiempo que disputó.