El futuro de Jonathan Silva condiciona el final de mercado
El lateral argentino quiere jugar en Primera, pero el Leganés no pondrá fácil su salida. En caso de continuar, podía forzar la marcha de algún defensa.
El futuro de Jonathan Silva condicionará en buena medida los escasos seis días que quedan en el mercado de fichajes del Leganés. Con las llegadas casi cerradas (el club no descarta algún movimiento de entrada más, ojo a Miguel de la Fuente), la marcha de algunos futbolistas centrará ahora todo el trabajo en Butarque, y buena parte de lo que suceda con esas salidas dependerá del caso Silva.
Silva ya ha trasladado al club su deseo de jugar en Primera División. Plantea el italo-argentino dar un salto similar al de Siovas, fichado recientemente por el Huesca. Sucede que, en su caso, el Leganés no está dispuesto a dejarlo salir a cualquier precio. Primero, porque es joven (26 años). Segundo, porque tiene contrato 2023. Siovas, de 32 años, acababa su contrato en 2021. Son casos diferentes, más aún cuando el fin de mercado se cierra y las alternativas son limitadas. El puesto de lateral izquierdo es tradicionalmente complejo en cualquier ventana de traspasos.
Además, el Leganés pagó hace apenas un año 2,7 millones de euros por su fichaje, lo que unido a los 200.000 euros que costó su cesión en 2018, elevan a casi tres millones lo invertido en Silva. Es, mínimo, lo que reclamarían al sur de la capital, aunque con el paso del tiempo, en el Lega se muestran menos receptivos precisamente por el escaso margen para hallar sustituto.
Propuestas mermadas por la crisis
Sin que haya trascendido qué equipos (aunque Betis y Getafe podrían estar entre ellos), en la Avenida de los Once Leones ya tienen propuestas sobre la mesa, además de algunos sondeos en los que las fórmulas sugeridas no convencen a los pepineros. La crisis y sus circunstancias hacen complicado preparar ofertas como las que reclama el Lega. Además, las cuentas pepineras gozan de excelente salud. En Butarque no necesitan vender para hace caja.
El asunto, por tanto, es complejo por las voluntades alejadas de ambas partes y porque ahora se antoja difícil que un tercer implicado intervenga para, chequera en mano, solventarlo a golpe de traspaso sonado. Pero en el tramo final de mercado todo puede pasar, insisten en Leganés, más con la alternativa de Javi Hernández ya en plantilla.
Entre tanto, el jugador sigue lesionado, tal y como confirmó José Luis Martí en la rueda de prensa previa al partido contra el Cartagena. Suma ya dos duelos consecutivos sin competir con el Leganés tras su ausencia en Lugo. Lasure, fichado hace una semana, lo suplió frente a los blanquinegros con buen rendimiento y el reconocimiento público de su entrenador al esfuerzo mostrado por el lateral maño.
El efecto dominó del caso Silva
Si finalmente Silva sale en lo que queda de mercado, aunque el Leganés no descarta nada, hay probabilidades de que no haga cambios en su defensa. El recién incorporado Javi Hernández pasaría a engrosar la nómina del lateral izquierdo junto a Lasure. Sin embargo, si Jonathan Silva permanece en la plantilla habría saturación en la retaguardia, sobre todo en el eje de la defensa.
Uno de los jugadores que podría ser perjudicado es Sergio González, fichado desde el Mirandés a coste cero en el inicio del mercado. De hecho, este central madrileño de 28 años fue la primera incorporación del proyecto Martí. Sergio ejerció de titular en los dos primeros partidos del curso, pero el pasado domingo, ante el Cartagena, le cedió el testigo a Omeruo.
Precisamente el Cartagena ha filtrado interés en Sergio, aunque el jugador no tiene constancia de interés alguno y, además, no se plantea su salida. El deseo de Sergio es crecer en Butarque y aspirar a jugar en Primera División.