Vendaval español en Moldavia

La Selección española volvió a escena tras seis meses de inactividad y lo hizo de la mejor manera, arrasando a Moldavia con un resultado sonrojante. Los tres puntos devuelven a España al liderato de la clasificación, pero la buena noticia no es solo esa. El nivel ofensivo que demostró La Roja fue muy alto, como lo llevaba siendo en los últimos enfrentamientos ante las potencias del mundo. Además, Alexia aportó el equilibrio que temía perderse ante la ausencia de Torrecilla por larga enfermedad.

Esta vez no hubo rival desde el minuto uno del choque. El conjunto español salió a por todas y en ningún momento pasó por aprietos. Todo parecía demasiado fácil y así fue. A los seis minutos abrió el marcador Lucía tras un gran centro de Alba por la derecha. Sólo cuatro después, España ampliaba el marcador gracias a una jugada ensayada entre Jenni y Corredera que completaba Alexia. El partido estaba resuelto en 10 minutos.

España respiró y tuvo minutos para coger aire antes de otra embestida, la definitiva. Todo era demasiado fácil y, pese a ello, siguió apretando en el área rival. Moldavia era como un caramelo para un niño y las españolas cayeron en la tentación a lo grande. Cuatro goles más fueron anotados en 12 minutos. Mariona, Jenni rematando a placer sola en el área pequeña, Lucía de nuevo y Alba pusieron un apabullante 0-6 al descanso.

España se marchó al entretiempo con nueve tiros a puerta, y de esos nueve, seis acabaron en el fondo de la red. Un resultado abultado y merecido. Nada cambió luego, pese a la diferencia abismal. España siguió llevando el timón del partido, pero con un punto de intensidad menor. Aun así, Mariona logró el séptimo en una jugada por dentro en el borde del área.

Llegó entonces el momento de cambiar, de dar minutos a las nuevas, de probar cosas nuevas, pese a que Vilda, al ser un partido oficial, solo tuvo la posibilidad de dar opción a tres. El premio lo tuvieron Aitana, Cardona y Guerrero. La primera de ella potenció la teoría de que España tiene fondo de armario, pues un tiro suyo acabó en el palo y al rechace Patri Guijarro logró el 0-8. La guinda llegó con un penalti transformado por Mariona, que coronó así su gran partido con un hat-trick.

Ni el alto césped que denunciaba Vilda en la previa pudo frenar a La Roja. España es ya un equipo compacto, completo, que avasalla en este tipo de partidos ante selecciones menores. Ha dado un paso de gigante para lograr el billete directo para la Eurocopa de 2022. En Moldavia volvió a verse. Ahora sólo falta sentenciar la clasificación en los tres partidos en casa –más otro fuera- que le quedan por jugar.