Nuevo 'tijeretazo' de Bartomeu en el fútbol base
Los jugadores y staff del filial y del juvenil ya no pueden utilizar el comedor de La Masia. La excusa del club es que el protocolo de seguridad por la Covid-19 sólo permite el acceso a los residentes.
Desde esta temporada, ni los jugadores ni el staff del Barcelona B ni del Juvenil pueden utilizar el comedor de la planta baja de La Masia, donde generalmente se reunían para desayunar o comer, antes o después del entrenamiento, respectivamente. Se trata de una medida que ha instaurado en el club como protocolo de seguridad del coronavirus -sólo pueden acceder a la Masia los deportistas inquilinos y los trabajadores autorizados-, pero que tiene también consecuencias directas dentro de la política de reducción de gastos al ahorrarse de esta forma un buen número de almuerzos y comidas.
De hecho, tanto a los jugadores como al resto de staff se les recomienda que si necesitan quedarse a comer, lo soliciten previamente para buscar una solución. Para algunos se trata de un inconveniente importante, sobre todo si viven relativamente lejos de la Ciutat Esportiva: los entrenamientos en estas categorías suelen acabar al filo de las 14 horas, por lo que no pueden comer antes de las 15 horas en el mejor de los casos.
Hay que recordar que el fútbol base ya 'sufrió' en sus propias carnes las secuelas de la pandemia del coronavirus al verse sometido todo el staff y empleados durante casi tres meses a un ERTE unilateral del 30% de rebaja salarial.