Pacheta: “Me llevo el cariño de una ciudad y de una afición, eso no tiene precio”
El técnico disfruta de unos días de descanso tras haber ascendido al Elche y no renovar. Desde Soria, hace balance a la espera de ofertas. Su sueño, entrenar en Primera.
Queda una semana para el inicio de LaLiga y Pacheta prácticamente acaba de iniciar sus vacaciones. ¿Cómo lo lleva?
Bien, descansando, bajando revoluciones y aprovechando el tiempo para estar con la familia y los amigos. Llevaba casi cinco años sin tener unos días seguidos de vacaciones.
Ya en frío, ¿cómo ha asimilado dejar el Elche como lo hizo?
Con naturalidad. Como ya dije en mi despedida: yo me voy, pero mi corazón se ha quedado en Elche.
¿Siente rabia, comprensión o indiferencia viendo lo que ha pasado?
Siento al Elche como algo mío. Lo veo desde la distancia, deseándole siempre lo mejor.
¿Hubo algún desencuentro con Bragarnik?
Ninguno. La propiedad toma las decisiones que cree convenientes porque se está jugando su patrimonio. Solo deseo lo mejor para el Elche y a su afición.
El Elche se veía como el gran perjudicado por el caso Fuenlabrada. Una vez acabado todo, ¿cree que usted es el damnificado por haber llegado tarde al mercado?
Es probable, pero yo ya sabía que esto podía pasar. Han pasado ofertas por delante, pero los tiempos no eran los mismos para todos. Siempre aposté por finalizar la temporada. Y se acabó de manera magnífica.
¿Hay algo de lo que se arrepienta o de lo que no se haya hablado, pero le haya hecho sufrir?
Claro que ha habido situaciones duras que te han quitado el sueño, pero al final todo ha valido la pena; ahora ya no es momento de hablar de ello.
¿Por qué sustituyó a Edgar Badia ante el Cádiz?
Porque creo en mi corazón, que era el que me pedía que San Román merecía jugar. Y creo que acerté. Tenía dos porteros top. Son decisiones que hacen crecer al grupo de manera exponencial.
¿Qué sensación le produce ver a sus ‘chicos’ Gonzalo Villar y Óscar Gil en la Sub-21?
Orgullo. En ello se ve reflejado el trabajo realizado por el cuerpo técnico y por los propios jugadores para crecer cada día.
Con Pacheta en el banquillo se traspasó a Sory Kaba (4M€,) a Gonzalo Villar (800.000€), a Juan Cruz (2,75M€), ahora a Óscar Gil (500.000€). ¿Se han acordado de sacarle la cuenta y darle las gracias?
Siempre he dicho que cuando me voy de un club, tengo que dejar una mejor institución y mejores jugadores. Me voy satisfecho de ambas cosas.
¿Estuvo cuestionado durante la temporada o siempre notó el respaldo del club?
Nunca me sentí cuestionado. Y si eso sucedió en algún momento, yo no me enteré.
¿Dónde entrenará en el futuro a corto o medio plazo?
No tengo ni idea. Quiero descansar, ver fútbol y esperar. Cuando vuelva a entrenar, lo valoraré todo para intentar no fallar en mi elección.
¿Valora opciones del extranjero?
Siempre las he valorado. He entrenado cuatro años fuera de España y esa experiencia me ha hecho mejor entrenador.
¿Ha perdido o ha ganado años de vida en el Elche?
Años no sé, pero me llevo el cariño de una ciudad y su afición. Eso no tiene precio.
¿Qué siente alguien que se va sin haber recibido ni una mala palabra, en su despedida, de los más críticos?
No tengo intención de convencer a todo el mundo, solo intento vivir y decidir bajo la normalidad y honestidad.
¿De quién se acuerda en este momento cuando piensa en Elche?
Me acuerdo de demasiada gente como para poner nombres. Dejo a mucha gente querida, a grandes amigos.
¿Qué tiene que aprender el fútbol español de la pandemia?
Que la salud es lo primero y que a mí me gusta el fútbol con público. Y que me voy sin ver el Martínez Valero lleno, que era uno de mis sueños. No lo he visto de facto, pero en mi interior sí siento haberlo conseguido.
¿Qué mantendría?
Los 22 citados; los cinco cambios; el VAR, mejorando su aplicación; y pienso que debemos jugar en las mismas medidas en todos los estadios.
¿Con qué sueña Pacheta en lo personal?
En lo personal, que mi familia y mis seres queridos estén bien de salud. Y en lo profesional, sueño con entrenar en Primera División.