Infantino elogió el desarrollo de los derechos laborales antes del Mundial 2022 en Qatar

La federación Internacional de Fútbol FIFA elogió los avances significativo de Qatar en el ámbito de los derechos laborales, al margen del anuncio de la ley 18 para el año 2020, consta la independencia de los trabajadores extranjeros sin necesidad a conseguir un permiso de su patronal para cambiar de empleador, de tal manera se fija el salario mínimo no discriminatorio.

Mientras tanto, la Organización Internacional del Trabajo, que desempeña un papel céntrico en este sentido, confirmó que por las nuevas reformas qataríes, se desintegró efectivamente el sistema de patrocinio, se marca una nueva época en el mercado laboral catarí.

En este sentido, Gianni Infantino, presidente de la FIFA, dijo:” felicitamos el estado de Qatar por este avance significativo, el anfitrión que desde que consiguió los derechos de organizar el Mundial 2022, se ha hecho esfuerzo colectivo a gran escala por parte de la autoridades locales y el Comité de Organización y Legado, responsable de gestionar los proyectos del Mundial 2022 en Qatar, como nuestros socios en Qatar, todos estamos agradecidos por haber logrado el caso convirtiéndose en un desarrollo alcanzable en el entorno de los derechos laborales.

Agregó:” con lograr este avance antes de que arranque el Mundial 2022, se demuestra el cambio positivo tangible, tanto como el legado sostenible, y cierto que quedan otros campos para lograr más evoluciones, seguimos trabajando a cerca con nuestros socios para promocionar nuestro plan laboral progresivo, que brinde prestaciones sostenibles para todos los trabajadores en Qatar, ya sean participantes o no en los preparativos del Mundial 2022”.

Qatar, el anfitrión del Mundial 2022, declaro nuevas reformas llamativas laborales, debido que aquellas reformas ya los trabajadores pueden cambiar de empleador sin necesitar a conseguir un permiso del patronal, ademes se fijo el salario mínimo no discriminatorio, que trata de un avance histórico, fue elogiado por las Organizaciones Internacionales de derechos humanos, sindicatos de trabajadores, a Amnistía Internacional, y el Centro del Deporte y Derechos Humanos.