El Benfica cierra a Darwin Ñúnez por 25 millones
El traspaso bate todos los récords: triplica la salida de Melo, la más cara del Almería, y se convierte en la entrada más cara en Portugal y en el movimiento más alto de la historia de Segunda.
De récord. Después de semanas de negociaciones tras el interés inicial, el Benfica se ha hecho con los servicios de Darwin Núñez, ganándole la partida al Brighton, Wolfsburgo y Leipzig, entre otros. La operación no ha sido sencilla, puesto que los ingleses y los alemanes ofrecieron más de 20 kilos, llevándose el gato al agua los de Lisboa poniendo encima de la mesa 25 millones de euros. La cifra en la historia por diferentes motivos. En el caso del Almería triplica la salida de Felipe Melo en 2008, cuando Alfonso García exigió hasta el último céntimo de la cláusula de rescisión, depositando el futbolista los 8 kilos de la Fiorentina por la misma.
Además, si su entrada fue hace un año la tercera entrada de Segunda División tras la de Ricardo Oliveira (el Zaragoza pagó 10 millones al Milan hace once años) y de su ya excompañero (8'8 del Nottingham al Almería), su salida se convierte en la más cara de la categoría de plata del fúbol español, superando los 22 kilos con los que Ken Bates fichó a Hasselbaink en 2000. No en vano, la cifra por la que se ha cerrado la operación hubiese parecido una quimera el estío pasado cuando Alfonso García vendió a Álvaro Giménez, el pichichi de Segunda, al Birmingham por un pírrico millón de euros. No sólo eso, sino que se trata de la compra más cara en tierras portuguesesas, por encima de la de Raúl Jiménez, procedente del Atlético al propio Benfica.
Llegar hasta el final de la partida no ha sido nada fácil. Una vez que Darwin se comprometió con el Benfica, restaba el entendimiento entre clubs. Luís Filipe Vieira no quería subir más allá de los 20 millones de euros, pero viendo que había más interesados con pujas más altas, ha terminado accediendo, máxime con el interés de Jorge Jesús, que ha convencido a su presidente de que en el futuro podrá sacar beneficio en un hipotético traspaso, en el que el Almería se llevaría parte de él. No en vano, las 'águilas' ya estuvieron interesadas en el delantero charrúa hace un año, cuando lo tuvieron a tiro por seis kilos, apostando fuerte la nueva propiedad almeriense con cerca de ocho millones (incluidas comisiones y bonus) por el 80% de sus servicios al Peñarol, quienes ahoran se ven beneficiados por este traspaso.
Si el verano pasado Darwin Núñez firmó cinco años con el Almería, en esta ocasión su relación contractual con el Benfica será la misma, siendo jugador lisboeta hasta 2025. El uruguayo, que ayer marchó hacia tierras malagueñas para comenzar la pretemporada con los de José Gomes (la propiedad almeriense apretó hasta el último momento con eso para ver que no iba de farol), volviéndose hoy una vez que la operación se cerró. En todas estas semanas de negociaciones el delantero ha mostrado una actitud intachable. El tira y afloja también estuvo en el sueldo: 1'5 millones de euros al año, queriendo una parte que fuese bruta y la otra neta, según Récord, argumentando la del jugador que un fichaje de ese nivel debía estar proporcional en cuanto al traspaso y cerca del tope del equipo (2'5 por temporada).
Los últimos flecos del traspaso giraron en torno a las comisiones, queriendo el entorno de Darwin llevarse 2'5 millones de euros, a lo que el Benfica se negó, según informa 'Récord', alegando Luís Felipe Viera que eso era responsabilidad del club vendedor. El director deportivo de la entidad lusa, Rui Costa, tuvo que desplazarse incluso a tierras españolas en jet privado para cerrar el fichaje. Tras una adaptación inicial, con idas y venidas con la absoluta de Uruguay, el '21' ha sido pieza clave en el Almería, participando en 2.609 minutos ligueros, repartidos en 32 encuentros (30 como tiltular) y materializando 16 goles. Su buen papel le ha servido para entrar en la historia de España y de Portugal.