Cómoda victoria del Mallorca ante un tierno Castellón
El conjunto bermellón se impuso por dos goles a cero al cuadro valenciano, gracias a los goles de Alegría y Sastre, que sentenciaron antes del descanso.
La salida de bermellones y 'orelluts', irreconocibles por sus indumentarias rosa y verdinegra, fue intensa, con un alto ritmo competitivo y con ganas de jugar, algo que se agradece cuando se llevan poco más de dos semanas de preparación tras una larga temporada por motivos ya conocidos.
Mallorca y Castellón se encuentran en Segunda en direcciones opuestas, los mallorquinistas tras descender de Primera y los castellonenses después de ascender de Segunda B y a fe que el encuentro dejó, inicialmente, buenas intenciones por ambas partes.
Los mallorquinistas trataron en todo momento de hacerse dueños del balón y solo llegadas con cierta aproximación a las porterías marcaron una primera mitad que finalmente destacó por los dos goles del equipo balear.
El primero llegó después de que Salva Sevilla, desde la banda derecha, tuviera todo el tiempo del mundo para pensar qué hacer antes de decidirse a centrar al interior del área donde Alegría, sin oposición alguna, remató de cabeza, sin saltar, para establecer el gol inicial.
Con el mando del juego, los de Luis García Plaza, insistieron hasta que en el tiempo añadido, el lateral derecho Joan Sastre lazó un zapatazo espectacular desde 30 metros para sorprender a Campos y poner el 2-0 justo antes del descanso.
Tras la reanudación comenzó el carrusel de cambios en el Castellón, que hizo cinco de salida, mientras que el Mallorca esperó unos minutos para empezar con las sustituciones. A partir de ahí, el partido se desordenó como es habitual en estos casos y los de Óscar Cano se encuentran de inicio, adaptándose a esos cambios, mientras que los insulares mantienen las mismas intenciones de la primera mitad; es decir, salir con rapidez por las bandas y buscar portería, jugando además con la tranquilidad del marcador favorable.
Los cambios en el Mallorca causaron el mismo efecto que a los castellonenses y son éstos los que ya acomodados en el campo se estiran un poco aunque sin profundidad en ataque. Los bermellones se relajaron y fueron perdiendo terreno hasta que un disparo de Abdón que se estrelló en el larguero sacó al partido de un letargo que ya no tuvo remedio.
Al final el 2-0 fue definitivo en el marcador con un Mallorca solvente y un Castellón que acaba de llegar y tiene que cogerle el tino a la categoría.