La nueva realidad de Busquets, Alba y Sergi Roberto: de vacas sagradas a vacas flacas
Si se quedan, será con la condición de un nuevo rol en el vestuario, así como una revisión de sus contratos, que se adapte al estatus actual que tengan en la plantilla.
A Sergio Busquets, Jordi Alba y Sergi Roberto no les va a salir ‘gratis’ quedarse en el FC Barcelona. Los tres jugadores tendrán que asumir una revisión de sus actuales contratos para salvaguardar al club económicamente, tras la pandemia de coronavirus, como por el nuevo rol que afrontarán en la plantilla con la llegada de Ronald Koeman al banquillo.
Sergio Busquets, por poner un ejemplo, es el quinto jugador de la plantilla con la ficha más alta de la plantilla -en torno a los 15 millones de euros brutos anuales-, Sergi Roberto es el décimo, con casi 10 millones de euros, mientras que Jordi Alba ocupa la decimosegunda plaza, con una ficha cercana a los 9 millones.
El club considera que estas cifras no estarán acordes al papel que tengan estos jugadores en la nueva temporada: el técnico holandés quiere apostar por la juventud en el once y el rol de estos futbolistas pasará a ser presumiblemente secundario. De ahí, que la intención del club es hacer una revisión contractual de las cantidades, poniendo especial énfasis a los pluses por objetivos, en detrimento de los fijos. Quien termina antes contrato, en 2022, es Sergi Roberto. Podría ampliar su contrato dividiendo el montante de sus dos últimos años de contrato.
Unas negociaciones que se presumen complicadas, pero que tendrán el marco de la crisis económica por la pandemia de coronavirus como argumento principal para pedir un esfuerzo a los jugadores que finalmente se queden en la plantilla.
Un caso aparte es Gerard Piqué. En principio su rol en la plantilla se mantiene intacto, pero también se está valorando la posibilidad de alguna rebaja salarial, teniendo en cuenta que su ficha anual gira entorno a los 13 millones de euros.